El primer ministro de Hungría, Viktor Orbán, y el presidente de China, Xi Jinping, acordaron este jueves intensificar la cooperación económica, energética y política, en un paso importante para fortalecer la influencia del gigante asiático en Europa Central.
«Hemos decidido emitir conjuntamente una declaración anunciando una cooperación estratégica integral entre China y Hungría», dijo Xi a un grupo selecto de medios húngaros y chinos después de sus conversaciones en Budapest.
En este sentido, Xi añadió que los dos países profundizarán el diálogo bilateral, así como la cooperación en una amplia gama de temas, desde económicos hasta nucleares y comerciales.
«China aprecia el firme compromiso de Hungría con la política de Una China y seguirá apoyando a Hungría en su desarrollo económico», destacó el presidente chino, mencionando proyectos como el tren que conectará Budapest con Belgrado y que se realizará gracias a inversiones chinas. .
Budapest y Pekín han firmado 18 acuerdos bilaterales, que van desde la preparación de inversiones en infraestructuras en Hungría hasta la promoción de conexiones ferroviarias con la vecina Serbia, anunció hoy el ministro de Asuntos Exteriores, Péter Szijjártó.
Más fricciones con la Unión Europea
Hungría, con constantes roces con Bruselas por su creciente política antirusa y ahora antichina, se ha convertido en el mayor receptor de inversiones chinas en la región en un momento en el que otros países de la Unión Europea comenzaban a alejarse de Asia. país por la presión de Estados Unidos y por su proximidad a Rusia.
Pekín ha invertido miles de millones en Hungría, que participa en su proyecto «Belt and Road», y considera al país una puerta de entrada clave para los 27. Xi, precisamente, expresó su deseo de que Hungría impulse las relaciones entre China y la UE cuando asuma el poder. . la presidencia del Consejo de la UE en julio.
El presidente chino, que también es secretario general del Partido Comunista de su país, añadió que trabajarán junto con Hungría «para ampliar la cooperación de China con los países de Europa Central y del Este».
Xi llegó a Budapest procedente de Serbia, el otro país de la región con el que mantiene mejores relaciones.
El presidente también llamó la atención sobre el hecho de que la iniciativa china «La Franja y la Ruta» es «compatible» con la llamada «apertura hacia el Este» de Orbán.
El Gobierno de Orbán, en el poder desde 2010, ya anunció en 2012 la llamada «apertura al Este», principalmente hacia China y Rusia, bajo el argumento de convertirse en un puente entre Occidente y Oriente.