El Gobierno de Venezuela rechazó este lunes lo que la Unión Europea (UE) calificó de «injerencia», luego de que el alto representante del bloque para Asuntos Exteriores, Josep Borrell, criticara la inhabilitación de la disidente María Corina Machado de los ejercicios populares. oficina pública.
En un comunicado, el Gobierno de Nicolás Maduro «rechaza enérgicamente» la declaración atribuida a Borrell, que «supone un nuevo acto de intervención en asuntos que son competencia exclusiva del Estado venezolano».
“Venezuela no acepta la tutela de ninguna potencia o grupo de países que se ajusten a los recordatorios imperiales” y “reafirma a los representantes de la UE que la legalidad y legitimidad del proceso electoral en Venezuela no depende ni dependerá de ningún actor extranjero”. principalmente al texto.
En ese sentido, la Nación pide a los Veintisiete que “se abstengan de hacer declaraciones indiscretas para preservar una interacción respetuosa”.
Borrell cree hoy que sanciones administrativas como la del exdiputado Machado “socavarán la democracia y el estado de derecho y profundizarán la crisis política y social de largo plazo en Venezuela”.
“La UE está profundamente preocupada por las decisiones que intentan impedir que los miembros de la oposición ejerzan sus derechos políticos fundamentales”, dijo el alto representante en un comunicado oficial. Agencias