Eduard Bello es un jugador que surge de las sombras del misterio. El gol imposible que marcó contra Brasil la noche del jueves fue como la continuación del que anotó en Chile, país donde jugó una temporada, de un tiro libre largo. Y decimos «misterio» porque es un jugador sin promocionar, poco se sabe de él, y de repente aparece con su pelo desordenado, su confianza y sus ambiciones.
Porque más allá de la magia contagiosa del momento, la venezolana, había que mirar atrás a la situación cuando Bello recibió el balón. No tuvo consideraciones ni concesiones, sólo el coraje de burlar a Marquinhos, uno de los grandes centrales del fútbol europeo, y transmitir descaradamente el mensaje del enigma que dejó petrificado al portero Ederson.
Bello miró un momento su trabajo, vio cómo el balón se enredaba en las redes y corrió, corrió sin cesar en busca de los brazos de apoyo de sus compañeros en el banquillo. Fue una espera de un momento, de un siglo, y la amalgama de ese tumulto duró toda la vida….
La duración de las cosas en el fútbol es corta, muy corta, y en su impermanencia lleva en el estómago partidos trascendentes y goles inimaginables, y así será Eduard Bello. Y volvemos a mirar atrás, sólo para recordar a Brasil. Al Brasil que ya no es Brasil, sino un terrible acto de imitación de lo que alguna vez fue.
Sin ideas transparentes, sin capacidad de abrir caminos, quedó enredado en sus propios pies, en su ineptitud, en su falta de ambición. Era un Brasil sin Brasil, un equipo sin alma donde el alma estaba de vacaciones. Pero eso no significa que siempre será así; Quizás anoche contra Uruguay, o cualquier día de estos, los efluvios de la macumba se pondrán verdes, los santos de la Bahía de Todos los Dioses volverán a la vida y entonces, y sólo entonces, aparecerá el equipo alucinatorio para asombrar al mundo entero. . y sus alrededores…
Enzo Troppiano, director técnico de la selección femenina de Caracas, regresó emocionado de la reciente Copa América disputada en Colombia. «Perdimos los tres partidos, pero nos elogiaron porque teníamos un equipo puramente joven», dice Troppiani.
“Hablamos con las jugadoras y entrenadores argentinos y todos elogiaron el trabajo que hemos hecho con las chicas. Que de ahí puedan salir jugadores para la selección venezolana”. Según Enzo, el fútbol femenino va a desplazar al fútbol masculino en el país, en algún momento, «porque es un movimiento que crece día a día y está sucediendo en todo el mundo».
Te veo allí.