Los Tigres del Licey de República Dominicana y los Criollos de Caguas de Puerto Rico protagonizaron este sábado otro capítulo de la histórica rivalidad del béisbol caribeño, esta vez en el Lending Depot Park de Miami y con tintes históricos para el torneo que reúne a los mejores del la región.
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Y según datos del Departamento de Prensa de la Serie del Caribe, al parque ubicado en la Pequeña Habana asistieron 35 mil 972 personas. Eso, ver el choque entre puertorriqueños y quisqueyanos, que terminó con victoria de los dirigidos por Gilbert Gómez por 5-2.
Esto representa la mayor asistencia para un partido del torneo caribeño. Superó las 35.961 almas que se presentaron hace un año en el Estadio Munumental de Caracas «Simón Bolívar» en La Rinconada, para disfrutar de la victoria de los Leones del Caracas 5-3 sobre Federales de Chiriquí en Panamá.
Cabe señalar que la continuidad del torneo en las sedes de Grandes Ligas, es decir en suelo estadounidense, dependió del éxito de esta edición en Miami. Con estos números se vuelve más que cantado, y por supuesto no hace más que confirmar la euforia que genera el béisbol latino y que la Serie del Caribe sigue vigente. Bueno, ¡Miami me lo confirmó! Puerto Rico me lo dio y República Dominicana ya respondió.