El Gobierno ruso -a través del Ministerio de Asuntos Exteriores- convocó este viernes al embajador de Japón en Moscú, Toyohisa Kozuki, después de que el país asiático decidiera enviar material militar a Ucrania.
«El 9 de junio, el ministro de Relaciones Exteriores de Rusia, Andrei Rudenko, llamó al embajador de Japón en Rusia, Toyohisa Kozuki, para expresar una protesta contra la decisión del gobierno japonés de comenzar a enviar equipo militar a Ucrania», dice el comunicado.
Para Rusia, estas acciones de Japón solo ponen en peligro las relaciones bilaterales, y también que Tokio debe -entonces- responder «por las muertes de civiles en Ucrania y en las regiones de la frontera rusa con ese país».
«Se le explicó a la parte japonesa que este paso conduce a una escalada de las hostilidades y un mayor aumento en el número de bajas humanas por parte de los soldados comandados por Ucrania», dice el informe, citado por Prensa Latina.
También afirmó que los saboteadores ucranianos están usando armas para atacar a civiles en las regiones rusas, lo cual es inaceptable, «las relaciones de Rusia con Japón están entrando en un peligroso callejón sin salida y no quedarán sin consecuencias», dijo.
En particular, el Ministerio de Defensa japonés dijo que entregó a Ucrania los 100 vehículos militares prometidos por el primer ministro, Fumio Kishida, en una ceremonia realizada en la entidad castrense.
Los citados vehículos -señala Sputnik- son camiones con capacidad para 10 personas y máquinas recogedoras de escombros.