Kiev también perdió unos 135 tanques y mil vehículos blindados sólo en la región de Kursk, entre otras piezas de artillería.
El Ministerio de Defensa ruso cifró el viernes en 20.200 el número de víctimas causadas al enemigo en los casi dos meses que dura la operación del ejército ucraniano en la región de la frontera rusa de Kursk.
Además, según el mando ruso, Ucrania habría perdido en Kursk 135 tanques y casi un millar de vehículos blindados, 165 piezas de artillería y 33 lanzamisiles, entre ellos ocho HIMARS y seis MLRS de fabricación estadounidense.
Sólo durante el último día el Ejército ucraniano sufrió más de 305 víctimas en esa región en conflicto, afirmó la Oficina de Defensa.
En las últimas 24 horas, las fuerzas rusas se enfrentaron a nueve brigadas ucranianas y repelieron dos contraataques enemigos en las proximidades de las localidades de Lyubimovka, Olgovka y Plekhovo, esta última situada a poco más de 10 kilómetros de Sudzha, el principal bastión de los ucranianos en el región.
Durante la última jornada, el Ejército ruso también lanzó ataques contra reservas enemigas situadas en la región ucraniana de Sumi, provocando bajas en las filas de doce brigadas de las Fuerzas Armadas de Ucrania. Las fuerzas ucranianas entraron en Kursk el 6 de agosto en lo que se considera la primera invasión de Rusia desde el ejército de Hitler en 1941.
El Estado Mayor ruso aseguró que expulsaría a las fuerzas invasoras, que buscarían utilizar Kursk como moneda de cambio en futuras negociaciones de paz y también frenaría el avance ruso en Donbás, algo que no ocurrió.