La causa de la muerte del coronel Óscar Dávila, destinado a la seguridad de la presidencia de Colombia y vinculado al ‘niñeragate’, fue un suicidio, según informó este miércoles por la mañana la Fiscalía, que cerró el caso.
Dávila, de 42 años, tenía 24 años de servicio en la Policía Nacional y hasta su muerte era coordinador del grupo de anticipación de la Presidencia.
En el medio opositor Semana, según el testimonio de una «fuente confidencial», acusaron al agente de haberle practicado las pruebas del polígrafo a Marelbys Meza, exniñera de la jefa de Gabinete de la Presidencia, Laura Sarabia, luego de la pérdida de unos 7.000 dólares de su casa.
La publicación también aseguró que el difunto coronel estaba al tanto de las «intercepciones» o intercepciones telefónicas que se le realizarían a la empleada doméstica para determinar si había robado el dinero. Por este asunto Sarabia fue destituido de su cargo y está siendo investigado.
¿Qué mostró la autopsia?
En conferencia de prensa conjunta con el Ministerio Público, el director de Medicina Legal, Jorge Paredes, afirmó que la conclusión a la que se puede llegar, «sin duda», es que la muerte de Dávila, ocurrida el 9 de junio a las 6:18 p.m. , «tiene todas las características de un suicida».
Paredes afirmó que se trata de un caso «típico» de herida por contacto y describió que «se encontró un orificio de entrada y un orificio de salida que provocaron lesiones y una gran fractura en la cavidad craneal».
Por su parte, la fiscal adjunta, Marta Mancera, dijo que para el cuerpo de la fiscalía el caso está resuelto, lo que pone fin a una serie de especulaciones aparecidas en medios opositores. Sin embargo, existe un pedido de investigación por parte de la defensa del coronel por supuesta “inducción al suicidio” por parte de funcionarios del Ministerio Público.
Mancera agregó que tanto por la trayectoria del disparo como por el residuo de percusión encontrado en su mano derecha, con el que activó el proyectil, se concluye que el caso es “positivo por suicidio”.