La política de Estados Unidos convierte a esta nación en el país más delincuente del mundo, dijo hoy el presidente sirio, Bashar Al-Assad, en una entrevista con el canal ruso RT, difundida por medios internacionales.
“Los lobbies son quienes dirigen las políticas de este país al servicio de sus intereses y objetivos económicos ya costa de otras personas”, dijo el mandatario.
El mandatario consideró que cuando el dólar abandone el tope de hegemonía económica surgirá un mundo multipolar, y agregó que actualmente “Estados Unidos ha comenzado a perder su hegemonía absoluta en los mercados mundiales”.
Según el presidente sirio, la política seguida por Occidente, especialmente Washington y sus aliados europeos, hacia Siria y el mundo se basa en la hipocresía y la mentira.
En cuanto a las pérdidas provocadas por la guerra impuesta a su país desde 2011, Al-Assad las estimó en más de 400.000 millones de dólares, añadiendo que los terremotos provocaron daños por encima de los 50.000 millones como cifra inicial.
Respecto a las relaciones con Turkiye, el presidente dijo que Damasco tiene problemas con los políticos de este país vecino y no con su gente.
La retirada de las fuerzas turcas de Siria y detener el apoyo de Ankara al terrorismo es un requisito clave para que me reúna con el líder turco, aclaró Al-Assad.
Por otro lado, denunció que cada vez que el ejército sirio avanza contra los terroristas, Israel ataca el territorio de este país como parte de su política de mezclar las cartas y prolongar la guerra.
El presidente sirio concluyó una visita de trabajo de tres días a Rusia durante la cual mantuvo un encuentro con el presidente ruso, Vladimir Putin, con quien abordó las relaciones estratégicas entre ambas naciones.
