El presidente de China, Xi Jinping, arribó este lunes a Rusia en visita de Estado de tres días.
Un reportero de Sputnik informó que el avión del mandatario chino aterrizó en la tarde del 20 de marzo en el aeropuerto internacional Vnúkovo-2, reservado para las delegaciones oficiales. Xi Jinping fue recibido por el vice primer ministro ruso, Dmitri Chernishenko, y una banda militar.
Al aterrizar en Moscú, el líder chino expresó sus saludos y mejores deseos al Gobierno y al pueblo rusos.
Además, prosiguió, se profundizó la confianza política mutua, se amplió la cooperación práctica y se llevó a cabo una interacción estrecha y eficaz en el ámbito internacional.
“China y Rusia, como grandes potencias y miembros permanentes del Consejo de Seguridad de la ONU, desempeñan un importante papel en los asuntos internacionales. En un mundo que dista mucho de estar en calma, China está dispuesta a apoyar a Rusia para defender enérgicamente un sistema internacional ONU-céntrico, defender un orden mundial basado en el derecho internacional y las normas fundamentales de las relaciones internacionales basadas en los propósitos y principios de la Carta de la ONU, perseguir un multilateralismo genuino, promover un mundo multipolar y democratizar las relaciones internacionales, y promover la gobernanza global en una dirección más justa y racional”, apuntó el mandatario.
Nuevo capítulo de amistad, cooperación y desarrollo entre China y Rusia
Un artículo firmado por el presidente de China, Xi Jinping, titulado “Avanzando con determinación para abrir un nuevo capítulo de amistad, cooperación y desarrollo común entre China y Rusia” fue publicado el lunes en el periódico ruso Rossíiskaya Gazeta y en el sitio web de la agencia de noticias RIA Novosti antes de su visita de Estado a Rusia, informó la agencia Xinhua.
A continuación reproducimos el texto íntegro del artículo, publicado por Xinhua:
Avanzando con determinación para abrir un nuevo capítulo de amistad, cooperación y desarrollo común entre China y Rusia
Xi Jinping
Presidente de la República Popular China
A invitación del presidente Vladimir Putin, pronto realizaré una visita de Estado a la Federación de Rusia. Rusia fue el primer país que visité tras ser elegido presidente hace 10 años. En la última década, he realizado ocho visitas a Rusia, viniendo con grandes expectativas y regresando con resultados fructíferos, y he abierto, junto con el presidente Putin, un nuevo capítulo para las relaciones China-Rusia.
China y Rusia son el mayor vecino y socio estratégico integral de coordinación del otro. Ambos somos países importantes en el mundo y miembros permanentes del Consejo de Seguridad de la ONU. Ambos países mantenemos una política exterior independiente y consideramos nuestra relación como una alta prioridad en nuestra diplomacia.
Existe una clara lógica histórica y una fuerte fuerza motriz endógena para el desarrollo de las relaciones entre China y Rusia. En la última década, hemos recorrido un largo camino en nuestra amplia cooperación y hemos dado pasos significativos hacia la nueva era.
Las interacciones de alto nivel han desempeñado un papel estratégico clave en la dirección de las relaciones China-Rusia. Hemos establecido todo un conjunto de mecanismos para las interacciones de alto nivel y la cooperación polifacética que proporciona importantes salvaguardias sistémicas e institucionales para los lazos bilaterales. Durante estos años, he mantenido una estrecha relación de trabajo con el presidente Putin. Nos hemos reunido 40 veces en ocasiones bilaterales e internacionales. Juntos hemos trazado el esquema de las relaciones bilaterales y la cooperación en diversos campos, y hemos mantenido una oportuna comunicación sobre los principales asuntos internacionales y regionales de interés mutuo, proporcionando una firme dirección para el desarrollo sostenido, sólido y estable de las relaciones China-Rusia.
Nuestras dos partes han cimentado la confianza política mutua y fomentado un nuevo modelo de relaciones entre grandes países. Guiados por una visión de amistad duradera y de cooperación beneficiosa para ambas partes, China y Rusia nos adherimos a los principios de no alineación, no confrontación y no apuntar a ningún tercero en el desarrollo de nuestros lazos. Nos apoyamos mutuamente de manera firme para seguir un camino de desarrollo adecuado a nuestras respectivas realidades nacionales y apoyamos el desarrollo y el rejuvenecimiento del otro. La relación bilateral se ha vuelto más madura y resistente, rebosante de nuevo dinamismo y vitalidad, y ha constituido el buen ejemplo para desarrollar un nuevo modelo de relaciones entre grandes países que se caracterice por la confianza mutua, la coexistencia pacífica y la cooperación beneficiosa para todos.
Nuestras dos partes han establecido un marco de cooperación integral y a diferentes niveles. Gracias a los esfuerzos conjuntos de ambas partes, el comercio entre China y Rusia superó el año pasado los 190.000 millones de dólares, un 116 por ciento más que hace diez años. China ha sido el mayor socio comercial de Rusia durante los 13 años consecutivos. Hemos visto un aumento constante de las inversiones en ambas direcciones. Nuestra cooperación en grandes proyectos en campos como la energía, la aviación, el espacio y la conectividad ha avanzado con paso firme. Nuestra colaboración en innovación científica y tecnológica, comercio electrónico transfronterizo y otras áreas emergentes está mostrando un fuerte impulso. Nuestra cooperación a nivel subnacional también está en auge. Todo ello ha aportado beneficios tangibles tanto al pueblo chino como al ruso y ha proporcionado una fuerza motriz incesante para el desarrollo y rejuvenecimiento respectivos.
Nuestras dos partes han actuado sobre la base de la visión de una amistad duradera y han reforzado constantemente nuestra amistad tradicional. Con ocasión de la conmemoración del 20º aniversario del Tratado de Buena Vecindad y Cooperación Amistosa China-Rusia, el presidente Putin y yo anunciamos la ampliación del tratado y añadimos nuevas dimensiones al mismo. Nuestras dos partes han celebrado ocho “años temáticos” a nivel nacional y han seguido escribiendo nuevos capítulos para la amistad y la cooperación chino-rusa. Nuestros dos pueblos se han apoyado y respaldado mutuamente en la lucha contra la COVID-19, demostrando una vez más que “en la necesidad se conoce al amigo”.
Nuestras dos partes han mantenido una estrecha coordinación en la escena internacional y han cumplido con nuestras responsabilidades como grandes países. China y Rusia están firmemente comprometidas a salvaguardar el sistema internacional centrado en la ONU, el orden internacional sustentado en el derecho internacional y las normas básicas de las relaciones internacionales basadas en los propósitos y principios de la Carta de la ONU. Hemos mantenido una estrecha comunicación y coordinación en la ONU, la Organización de Cooperación de Shanghai, los BRICS, el G20 y otros mecanismos multilaterales, y hemos trabajado juntos por un mundo multipolar y una mayor democracia en las relaciones internacionales. Hemos practicado activamente el verdadero multilateralismo, promovido los valores comunes de la humanidad y defendido la construcción de un nuevo tipo de relaciones internacionales y de una comunidad con futuro compartido para la humanidad.
Echando la vista atrás hacia el extraordinario recorrido de las relaciones entre China y Rusia en los últimos más de 70 años, tenemos la firme convicción de que nuestra relación no ha llegado fácilmente a donde está hoy, y que nuestra amistad crece sin cesar y debe ser apreciada por ambas partes. China y Rusia han encontrado el camino correcto para sus interacciones de Estado. Esto es esencial para que la relación resista la prueba de las cambiantes circunstancias internacionales, una lección confirmada tanto por la historia como por la realidad.
Mi inminente visita a Rusia será un viaje de amistad, cooperación y paz. Espero trabajar con el presidente Putin para adoptar conjuntamente una nueva visión, un nuevo proyecto y nuevas medidas para el desarrollo de la asociación estratégica integral de coordinación China-Rusia en los próximos años.
Para ello, nuestras dos partes deben mejorar la coordinación y la planificación. Al centrarnos en nuestras respectivas causas de desarrollo y rejuvenecimiento, debemos ser creativos en nuestro pensamiento, crear nuevas oportunidades e inyectar nuevos impulsos. Es importante que aumentemos la confianza mutua y hagamos uso del potencial de la cooperación bilateral para mantener las relaciones China-Rusia a un nivel alto.
Nuestras dos partes deben elevar tanto la calidad como la cantidad de las inversiones y la cooperación económica e intensificar la coordinación política para crear condiciones favorables para el desarrollo de alta calidad de nuestra cooperación en materia de inversiones. Tenemos que impulsar el comercio bidireccional, fomentar una mayor convergencia de intereses y áreas de cooperación, y promover el desarrollo complementario y sincronizado del comercio tradicional y las áreas emergentes de cooperación. Tenemos que hacer esfuerzos sostenidos para crear sinergias entre la Iniciativa de la Franja y la Ruta y la Unión Económica Euroasiática, a fin de proporcionar más apoyo institucional a la cooperación bilateral y regional.
Nuestras dos partes deben intensificar los intercambios culturales y personales y garantizar el éxito de los Años de Intercambio Deportivo China-Rusia. Debemos hacer un buen uso de los mecanismos de cooperación subnacional para facilitar más interacciones entre provincias/estados y ciudades hermanas. Debemos fomentar los intercambios de personal e impulsar la reanudación de la cooperación turística. Debemos ofrecer mejores campamentos de verano, escuelas gestionadas conjuntamente y otros programas para mejorar constantemente el entendimiento mutuo y la amistad entre nuestros pueblos, especialmente entre los jóvenes.
El mundo actual está experimentando profundos cambios nunca vistos en un siglo. La tendencia histórica a la paz, el desarrollo y la cooperación beneficiosa para todos es imparable. Las tendencias dominantes de multipolaridad mundial, globalización económica y mayor democracia en las relaciones internacionales son irreversibles. Por otra parte, nuestro mundo se enfrenta a complejos y entrelazados retos de seguridad tradicionales y no tradicionales, a perjudiciales actos de hegemonía, dominación e intimidación, y a una larga y tortuosa recuperación económica mundial. Los países de todo el mundo están profundamente preocupados y deseosos de encontrar una salida cooperativa a la crisis.
En marzo de 2013, al hablar en el Instituto Estatal de Relaciones Internacionales de Moscú, observé que los países están vinculados entre sí y dependen unos de otros a un nivel nunca visto, y que la humanidad, que vive en la misma aldea global, se ha convertido cada vez más en una comunidad con futuro compartido en el que los intereses de todos están estrechamente entrelazados. Desde entonces, he propuesto en distintas ocasiones la Iniciativa de la Franja y la Ruta, la Iniciativa de Desarrollo Global, la Iniciativa de Seguridad Global y la Iniciativa de Civilización Global. Todas ellas han enriquecido nuestra visión de una comunidad de futuro compartido para la humanidad y han proporcionado vías prácticas para alcanzarla. Forman parte de la respuesta de China a los cambios del mundo, de nuestro tiempo y de la trayectoria histórica.
Durante estos diez años, los valores comunes de la humanidad, que son la paz, el desarrollo, la equidad, la justicia, la democracia y la libertad, han echado raíces más profundas en el corazón de la gente. Un mundo abierto, inclusivo, limpio y hermoso, con paz duradera, seguridad universal y prosperidad común se ha convertido en la aspiración compartida de cada vez más países. La comunidad internacional ha reconocido que ningún país es superior a los demás, que ningún modelo de gobernanza es universal y que ningún país debe dictar el orden internacional. El interés común de toda la humanidad es un mundo unido y pacífico, en lugar de dividido y volátil.
Desde el año pasado, se ha producido una escalada generalizada de la crisis ucraniana. China ha mantenido en todo momento una posición objetiva e imparcial basada en los méritos de la cuestión, y ha promovido activamente las conversaciones de paz. He presentado varias propuestas, a saber, observar los propósitos y principios de la Carta de las Naciones Unidas, respetar las legítimas preocupaciones de seguridad de todos los países, apoyar todos los esfuerzos conducentes a la solución pacífica de la crisis y garantizar la estabilidad de las cadenas industriales y de suministro mundiales. Se han convertido en los principios fundamentales de China para abordar la crisis de Ucrania.
No hace mucho, publicamos la Posición de China sobre la solución política de la crisis de Ucrania, que tiene en cuenta las preocupaciones legítimas de todas las partes y refleja el entendimiento común más amplio de la comunidad internacional sobre la crisis. Ha sido constructiva para mitigar los efectos de la crisis y facilitar su solución política. No existe una solución sencilla para una cuestión compleja. Creemos que en la medida en que todas las partes hagan suya la visión de una seguridad común, global, cooperativa y sostenible, y mantengan diálogos y consultas en pie de igualdad, de manera racional y orientados a los resultados, encontrarán una vía razonable para resolver la crisis, así como un amplio camino hacia un mundo de paz duradera y seguridad común.
Para gestionar bien los asuntos del mundo, uno debe ante todo gestionar bien sus propios asuntos. El pueblo chino, bajo la dirección del Partido Comunista de China, se esfuerza unido por impulsar el rejuvenecimiento de la nación china en todos los frentes a través del camino chino hacia la modernización. La modernización china se caracteriza por los siguientes rasgos: es la modernización de una enorme población, la modernización de la prosperidad común para todos, la modernización del avance material y ético-cultural, la modernización de la armonía entre la humanidad y la naturaleza, y la modernización del desarrollo pacífico. Estos rasgos distintivos chinos son la cristalización de nuestras prácticas y exploraciones a lo largo de muchos años, y reflejan nuestra profunda comprensión de la experiencia internacional. En el futuro, impulsaremos firmemente la causa de la modernización china, nos esforzaremos por lograr un desarrollo de alta calidad y ampliaremos la apertura de alto nivel. Creo que esto brindará nuevas oportunidades de desarrollo a Rusia y a todos los países del mundo.
Al igual que cada nuevo año comienza con la primavera, cada éxito comienza con las acciones. Tenemos todos los motivos para esperar que China y Rusia, como compañeros de viaje en la senda del desarrollo y el rejuvenecimiento, hagan nuevas y mayores contribuciones al avance de la civilización humana.