Petroperú enfrenta serios desafíos que incluyen la gestión de sus activos, el bienestar de sus trabajadores, así como la producción y distribución de petróleo crudo. Es por eso que las autoridades de la petrolera estatal advierten al Gobierno de la presidenta Dina Boluarte que la empresa es insostenible, por lo que piden que se reestructure o acepte la quiebra.
A través de un comunicado del 27 de agosto, los directivos de la empresa advirtieron que el Gobierno peruano debe comenzar a considerar, como una de las posibles soluciones al problema, aceptar su quiebra y afrontar las obligaciones financieras y legales correspondientes. Además, las autoridades también señalan la posibilidad de una nueva capitalización con recursos estatales o una reestructuración que asegure la atracción de capital privado a la empresa.
Los directivos designados por la Asamblea General de Accionistas (AGM) han pedido al Gobierno actuar con urgencia para definir el futuro de Petroperú, ya que su situación financiera es preocupante desde hace meses, pero ha empeorado en los últimos días de agosto.
La petrolera cerró el año 2023 con pérdidas por 830 millones de dólares y proyecta finalizar 2024 con pérdidas superiores a otros 700 millones. Según los estados financieros de la empresa, la deuda acumulada de la petrolera asciende a unos 8,5 mil millones de dólares.
Fuente: Medios Internacionales
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