El próximo jueves 16 de marzo, las dos cámaras del Parlamento francés votarán el proyecto de ley de reforma de las pensiones, luego de que una comisión mixta integrada por representantes de la asamblea y el senado acordara el miércoles un texto legislativo común, que no favorece al pensionado, ya que la edad para este proceso aumenta entre los 62 y 64 años.
La comisión, reunida a puerta cerrada, validó los veinte artículos que componen esta ley, con 10 votos a favor de los legisladores macronistas y conservadores, así como cuatro en contra, de izquierda y ultraderecha.
La primera ministra francesa, Élisabeth Borne, afirmó que el acuerdo «para preservar nuestro sistema de pensiones» demuestra que es posible «construir juntos soluciones para el país». Así lo indicó a través de su cuenta en la red social Twitter.
Entre los puntos del proyecto de ley está: el aumento de la edad mínima de jubilación, que se hará de forma progresiva a partir de 2030. También avanza a 2027, el aumento de 42 a 43 años el periodo de cotización para obtener una pensión completa, algo que está ya legislado. para 2035.
Ante el inicio de una nueva marcha en París contra el proyecto, la Confederación General del Trabajo (CGT) y la Confederación Francesa Democrática del Trabajo (CFDT) advirtieron al gobierno sobre las consecuencias de utilizar el artículo 49.3 de la Constitución para imponer leyes.
Los secretarios generales de la CGT, Philippe Martinez, y de la CFDT, Laurente Berger, instaron al Ejecutivo a tener en cuenta la reivindicación de la mayoría de los franceses que se oponen al aumento de la edad de jubilación.
Luego del examen de cada asamblea, 7 diputados y 7 senadores de diferentes sensibilidades acordaron y propusieron un texto común para preservar nuestro sistema de pensiones.
A través de este compromiso, responden al pedido de los franceses de construir juntos soluciones para el país.
— Élisabeth BORNE (@Elisabeth_Borne) 15 de marzo de 2023
Fuente Telesur
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