El Papa Francisco expresó su preocupación por el aumento de la violencia en Haití en los últimos días, y pidió un mayor apoyo de la comunidad internacional para poner fin a esta compleja y peligrosa situación.
En sus palabras tras el rezo dominical del Ángelus, al mediodía, el Sumo Pontífice declaró desde la ventana de su estudio en el Palacio Apostólico Vaticano, ante los fieles y peregrinos reunidos en la Plaza de San Pedro, que «estoy cerca de la Iglesia y el querido pueblo haitiano, que sufre mucho desde hace años.
Francisco pidió que «todos ofrezcan su contribución para aumentar la paz y la reconciliación en el país», con el apoyo renovado de la comunidad internacional, para que «cesen todas las formas de violencia».
La crisis en Haití se agravó luego de que grupos criminales armados atacaran el Palacio Presidencial y la Jefatura de Policía, tras controlar gran parte de esa ciudad y las calles, con el objetivo de derrocar al primer ministro Ariel Henry, reseña Prensa.
Decenas de personas han sido asesinadas en ese país y más de 15.000 se han visto obligadas a huir de sus hogares desde que comenzaron los ataques coordinados de pandillas el 29 de febrero.
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