El representante de Palestina en la ONU, Riyad Mansour, pidió hoy en el Consejo de Seguridad poner fin de forma inmediata e incondicional a la agresión en Gaza y al genocidio.
Durante la reunión del principal organismo de paz mundial dedicada en particular al problema de la destrucción del sistema sanitario en Gaza por parte de Israel, el diplomático calificó la situación de «infierno sin fin».
«Terminaremos 2024 con Palestina y comenzaremos 2025 con Palestina y es lógico, el Consejo pondrá fin a esta agresión de forma inmediata e incondicional», subrayó Mansur, quien rindió homenaje a los médicos que ofrecieron la suya para salvar vidas.
Dijo que en Gaza está en juego la humanidad misma y elogió la resistencia de su pueblo que, a pesar de todo, se puso de pie.
Mencionó el mensaje de un médico asesinado que, según dijo, escribió en un mural: «quien llegue hasta el final será el que cuente la historia». Hicimos lo que pudimos, recuérdalo.
Pero a estas personas – añadió Mansour – les debemos más que la memoria: no hay explicación para este infierno en Gaza desde hace más de 15 meses. También señaló que en medio de este dantesco escenario, la comunidad internacional no ha estado a la altura.
«El personal médico lucha para salvar vidas humanas, poniendo en peligro la suya propia, pero no se rinde», afirmó el representante palestino. «Es inmoral, intolerable y debe terminar», afirmó.
Denunció que Israel con sus ataques indiscriminados viola el principio humanitario internacional.
La destrucción sistemática del sistema sanitario en Gaza es una «barbarie», afirmó Mansour, refiriéndose también al hecho de que «los niños palestinos viven un infierno aquí en la tierra».
Israel quiere normalizar el genocidio, subrayó, condenando las detenciones arbitrarias y las desapariciones forzadas de personal médico. También advirtió que se trata de una limpieza étnica.
A pesar de los argumentos, a su vez, el representante de Israel justifica los crímenes como legítima defensa.