“¿Qué he mantenido a lo largo de estos años? Primero, el amor y respeto por mi familia, especialmente por la mujer (Ibis) que Dios puso en mi camino para ser mi compañera. Creo que eso es lo único importante. En el resto, mayores en todo, menos en espíritu. Siento lo mismo, el amor por el béisbol sigue ahí”, citó Oswaldo Guillén, quien ayer celebró seis décadas de existencia.
El actual manager finalista de los Tiburones de La Guaira tiene una trayectoria envidiable, como ser Novato del Año de la Liga Americana en 1985, y luego, dos décadas después, ser campeón mundial como manager de los Medias Blancas de Chicago.
Además de la familia, sin duda el centro de su mundo, el béisbol también tiene su lugar: «En mi carrera, empezando aquí, hay varias personas a las que tengo que agradecer. Primero Pedro Padrón Panza. Segundo detrás de Pompeyo Davalillo. Sin Pompey no tendría el amor y el respeto que tengo por este juego. Para mí fue un hombre clave en mi desarrollo profesional. Ya en Estados Unidos, mucha gente. Creo que una es la amistad que tengo con el dueño de los White Sox, quien me ha enseñado muchas cosas, sobre todo fuera del campo, especialmente cómo administrar mi dinero”.
Respecto a los mejores campocortos venezolanos que ha visto, fue tajante: “Para mí el que más me ha impresionado en mi vida es ‘Cheo’ (José) Escobar. En segundo lugar, Argenis Salazar y luego Álex González. La gente habla de Vizquel. Obviamente él ha sido quien nos ha puesto (a los campocortos) al más alto nivel de las Grandes Ligas… pero uno de los mejores que he visto y me ha gustado han sido esos tres personajes. Lamentablemente Escobar no bateó, y aunque sí llegó a Grandes Ligas, fue sólo por un momento. Pero los captó a todos y fue muy inteligente”.
No dudó en citar a David Concepción “como mi beisbolista favorito. «Utilizo el número trece por él, y también es mi amigo».
Destacó abiertamente que “desde nuestro tiempo hasta ahora hay mejores beisbolistas venezolanos. De eso no hay duda, hay muchos. Se ve el talento que Acuña Jr. Verga tiene, ese chico tiene un talento que no se ve ni aquí ni allá (EEUU). Y hay muchos más.»