La Organización Panamericana de la Salud (OPS) ha alertado de un aumento de casos de chikungunya en todo el continente americano, donde se han registrado más de 210.000 contagios en los primeros meses de 2023.
Cinco naciones americanas muestran cifras muy superiores a las registradas en igual período de años anteriores. Paraguay atraviesa la peor epidemia de chikungunya de su historia con más de 138.730 casos.
Argentina y Uruguay también reportaron transmisión local por primera vez en 2023. Bolivia registró altos niveles de transmisión de chikungunya (1.150 casos) y dengue (116.224 casos), enfermedad transmitida por el mismo mosquito.
«Lo que estamos viendo este año son cambios en la magnitud y el momento. La epidemia es mucho más temprana y con más casos que en los últimos años», dijo Thais dos Santos, asesora de la OPS para la Vigilancia y el Control de Enfermedades Arbovirales, durante un seminario web.
A nivel mundial, la enfermedad ha sido detectada en más de 115 países. Sin embargo, en 2023 hubo un aumento en la circulación de chikungunya en las Américas con más de 214.000 casos reportados.
Causas del aumento
La especialista de la OPS dijo que el cambio climático es uno de los factores que contribuye a la propagación del chikungunya, debido a las altas temperaturas o al aumento de las lluvias y la consecuente humedad que le brinda al mosquito Aedes las condiciones para sobrevivir.
“Los largos períodos de calor en el sur de América han permitido que el mosquito se desarrolle bien en lugares donde antes no estaba”, agregó Dos Santos.
Otro de los factores que enumera la OPS es la urbanización creciente y no planificada que puede propiciar la propagación, ya que los Aedes prefieren ambientes urbanos y cálidos, y buscan puntos que acumulen agua en casa para reproducirse.
vacunas chikungunya
Aunque actualmente no existe una vacuna científicamente aprobada para inmunizar contra la enfermedad, se han desarrollado siete sueros en el mundo para prevenirla, de los cuales tres se encuentran en fase tres de ensayos clínicos.
Por ahora, los centros de control de enfermedades de muchos países sugieren que la mejor protección es prevenir y evitar las picaduras de mosquitos.
Además, la OPS avanza en la capacitación de miles de médicos para un «mejor manejo de la enfermedad», dijo Dos Santos. A su vez, la entidad de salud ha organizado jornadas para que especialistas con mayor experiencia en el tratamiento del chikungunya, como Brasil, ayuden a otras regiones con el manejo de casos pediátricos.