Al menos ocho personas murieron, entre ellas una niña de ocho años, y más de 2.800 resultaron heridas este martes, tras la explosión de la cadena de buscapersonas o localizadores en distintos puntos del Líbano, que estaban en manos de miembros del ejército libanés. El grupo chiita Hezbolá, según informó el Ministerio de Salud Pública del país de Oriente Medio.
El jefe del ministerio, Firas Abiad, dijo que la mayoría de los heridos sufrieron daños en la cara, las manos o el abdomen. Hospitales de todo el país recibieron un gran número de víctimas a partir de las 15.30 horas, todo ello como consecuencia de la detonación de los localizadores.
Poco después, Hezbolá confirmó que habían explotado «una serie de dispositivos de mensajería conocidos como ‘buscapersonas’, que están en posesión de muchos trabajadores en diferentes unidades e instituciones» de formación.
El movimiento afirmó en su nota que al menos dos de sus miembros murieron en el incidente, aunque por el momento se desconoce la identidad de la mayoría de los muertos. Entre los heridos menos graves se encuentra el embajador de Irán en el Líbano, Muchtaba Emani.
Aunque al principio el grupo se mostró reacio a difundir «rumores» que sirvieran a la «guerra psicológica» de Israel, posteriormente culpó a ese país de lo ocurrido y prometió que esta acción tendrá «sólo castigo».
baterías calientes
«El enemigo israelí es plenamente responsable de esta agresión criminal», afirmó la poderosa organización en un comunicado, añadiendo que Israel «sin duda recibirá su justo castigo». El Ministerio de Asuntos Exteriores del Líbano también culpó a Israel por lo sucedido. Mientras tanto, el Ministerio de Telecomunicaciones confirmó que los dispositivos fueron introducidos recientemente en el país.
«No tengo los detalles, pero tengo conocimiento de que este cargamento de dispositivos llegó hace poco», dijo el ministro de esa cartera, Johanny Corn, quien también dijo que sus funcionarios aún están recopilando información, pero que, según las primeras Según las investigaciones, las baterías del bíper se calentaban, por lo que algunas personas «sintieron la temperatura del dispositivo y lo tiraron» antes de que explotara.
«Tal vez se activó de forma remota, pero no sabemos cómo», añadió Corn. Asimismo, dijo que es muy probable que los inquilinos fueran introducidos al Líbano con este propósito. «Tenemos que saber cómo y cuándo este envío de dispositivos entró en el Líbano, a qué empresa pertenecen, quién es el propietario… Tenemos que conocer más detalles para saber cómo funciona este dispositivo y cómo entró en el Líbano».
Las explosiones simultáneas se produjeron principalmente en las zonas del sur del país y en los suburbios de Beirut, controlados por el movimiento armado, que lleva más de 11 meses enfrascado en un intenso fuego cruzado con el Estado judío.
Fuente: Medios Internacionales
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