Alrededor de 1,4 millones de familias argentinas podrían perder los subsidios de luz y gas en diciembre próximo por no completar el registro para seguir recibiendo el beneficio.
Se trata de los usuarios que tienen una tarifa social y que no han podido completar sus datos en el Registro de Acceso al Subsidio de Energía (RASE), que ha sido modificado para hacerlo más engorroso e inaccesible.
Sin embargo, el Gobierno de extrema derecha planea lanzar una nueva campaña informativa para que se registren, pero no está confirmado que así sea. Si no lo hacen o no se registran, perderán los subsidios a partir de diciembre.
Según Energy Report, de los 1,7 millones de hogares que tuvieron que realizar el trámite RASE, sólo lo hicieron 300.000, apenas el 18% del total.
La posibilidad de ingresar datos en el RASE se abrió en junio por 60 días y en agosto se extendió por otros 30 días hasta el 4 de septiembre. Desde entonces, el Ministerio de Energía se encuentra analizando las preguntas que se han formulado.
El gobierno de Javier Milei avanza en una «depuración» de algunos beneficios, que también se han visto afectados por la famosa «motosierra» de recortes que su administración está haciendo para pagar sus cuentas como parte del camino hacia el ajuste tributario.
La gestión de Alberto Fernández lanzó la segmentación tarifaria en 2022 para la cual todos los usuarios debían registrarse en el RASE o perderán el subsidio. Las familias se dividieron en ingresos altos (Nivel 1 sin subsidio), Ingresos bajos (Nivel 2) e Ingresos promedio (Nivel 3).
