Cientos de migrantes, en su mayoría venezolanos, intentaron cruzar el domingo 12 de marzo en una estampida hacia territorio estadounidense por uno de los puentes fronterizos ubicados en Ciudad Juárez, México (norte), desesperados por obtener asilo en ese país.
Los grupos sudamericanos se dieron cita alrededor del mediodía en el puente internacional Paso del Norte-Santa Fe, uno de los cinco que conectan a Juárez con Estados Unidos, atraídos por el rumor de que tendrían paso libre para la celebración de un supuesto «Día del Inmigrante».
“Cientos de personas entraron en medio del puente donde las autoridades estadounidenses lo cerraron seguro, por protocolo”, dijo Enrique Valenzuela, coordinador del Consejo Estatal de Población de Chihuahua, estado donde se encuentra Ciudad Juárez, que vio el incidente.
“Insistieron en entrar y (…) los agentes de seguridad estadounidenses salvaron esa fila”, agregó Valenzuela, quien atiende a la gran población migrante que llega a esta ciudad, cercana a las ciudades estadounidenses de El Paso, Texas y Santa Teresa. . , en Nuevo México. .
“Todos corrimos y pusieron una barrera con alambres. Nos tiraron gases lacrimógenos. Muchos se cayeron del puente”, dijo Jackson Solís, un venezolano de 23 años que se encuentra del lado mexicano del puente que cruza el Río Grande. .
El joven lleva seis meses esperando conseguir una cita para solicitar asilo en Estados Unidos, donde quiere ir a trabajar. Solís dijo que duerme en la calle porque no tiene dinero para pagar la vivienda y que, para la alimentación, depende de la caridad de la gente.
Algunas madres con niñas y niños han manifestado su desesperación que aseguran que hubo quienes lograron cruzar, pero que en su mayoría eran hombres los que viajaban solos.
El gobierno de Joe Biden propuso en febrero de 2023 nuevas restricciones de asilo para los migrantes que lleguen por la frontera con México, y que los obligaría a solicitarlo en los países por los que transitan o a través de citas en línea.
Estas medidas se anuncian en momentos en que el mandatario demócrata es acusado por la oposición republicana de haber perdido el control de la frontera, con más de 4,5 millones de migrantes interceptados en esa región desde que asumió el cargo.
Agencias