“Agradezco también a la directiva de Magallanes, porque me dieron esta vida. Cuando huelo el césped del estadio José Bernardo Pérez (Valencia), enseguida quiero un uniforme. No me hables de Magallanes porque me duele la derrota”, dijo Melvin Mora, en conferencia de prensa luego de ser incluido en el Salón de la Fama del Béisbol de Venezuela, ubicado en Valencia.
Cabe recordar que ganó tres campeonatos con el barco en los años 90, y fue clave tanto para el palo como para el guante: “Agradezco a Juan José Ávila, por los años que estuvimos juntos en los años 90. Cuando hablamos de Magallanes lo hacemos como campeones. De Magallanes no hablemos ahora, porque eso me da algo (risas)”.
El orgullo de Agua Negra, estado Yaracuy, recordó el apoyo que recibió cuando, a sus 19 años, fue descubierto por Andrés Reiner, quizás el cazatalentos que más prospectos venezolanos ha llevado a las Grandes Ligas.
Mora fue un deportista variado, habiendo jugado fútbol profesional de segunda división en Venezuela, baloncesto, jabalina y boxeo.
A Reiner le había llamado la atención la capacidad atlética de Melvin. Sin embargo, el buen ojo del cazatalentos observó que como boxeador, Mora saltaba muy bien la cuerda, por lo que le pidió que le enseñara a Bob Abreu y otros miembros de la academia de Houston en el estado Carabobo esta rutina de preparación física.
Cuando Mora recuerda a Reiner, lo hace con orgullo. Señaló que Johan Santana, Bob Abreu, Richard Hidalgo, Carlos Guillén y Freddy García, entre otros, todos fichados en su momento por la organización de Houston, «nos sentimos agradecidos de que este hombre haya cruzado nuestras vidas. Es una de las personas que significó para nosotros un segundo padre, e incluso, para algunos, un primer padre, porque aguantó todas nuestras malas misiones (risas), «Él siempre nos guió».
Reiner señaló en muchas ocasiones que más que las herramientas que Mora tenía en su momento, lo cautivó su voluntad de hierro, por lo que nunca dudó que el yaracuyano llegaría a las mayores: “Melvin Mora debe servir de ejemplo para todos los jugadores venezolanos. , porque tuvo que luchar mucho”.
Y Mora no lo defraudó: “Para mí, hablar de él (Reiner) representa orgullo. Cuando fui incluido en el Salón de la Fama de Baltimore, él me dijo algunas palabras: “La persona que menos pensé que entraría primero al Salón de la Fama fue la que lo hizo. Ahora puedo morir en paz.’ «Le dije que se iba a morir», pero dos semanas después lamentablemente falleció.
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Otro recuerdo que muestra el deseo de Mora de aparecer fue una anécdota recordada por el conductor del evento, el narrador Carlos Feo. Y ese fue el día que el utilitario firmó con Magallanes. Citó que mientras uno a uno contrataban a los prospectos, el yaracuya se coló y le dijo al negociador “pon la cifra que quieras, yo sé que quiero llegar a Grandes Ligas”.