Este debería ser un gran año para el Príncipe Harry y Meghan Markle.
La pareja causó sensación a fines de 2022 con el estreno de su tan esperada serie documental de Netflix. Harry y Megan.
Y aunque la crónica de seis episodios podría no contener tantas revelaciones jugosas como esperaban algunos espectadores, el documental fue generalmente bien recibido.
Lo mejor de todo, fue solo el comienzo de una ofensiva de encanto que prometía impulsar la imagen pública de los Sussex y lanzar una nueva y emocionante etapa en sus carreras.
Enero de 2023 trajo la publicación de las memorias de Harry, repuesto – y con él, el primer contratiempo en el plan de la pareja para dominar el mundo.
El libro de Harry fue un éxito comercial, pero la respuesta del público no fue tan cercana como él y Meghan esperaban.
De hecho, hasta los fans del Duque se quejaron de que su recuerdo tenía un tono un poco quejumbroso, y que este niño de inmenso privilegio parecía disfrutar el papel de víctima.
En estos días, los Sussex se enfrentan a otra crisis de relaciones públicas gracias al escepticismo generalizado sobre las afirmaciones de Harry y Meghan de que fueron perseguidos por paparazzi por las calles de Manhattan el mes pasado.
Ahora, los expertos dicen que el duque y la duquesa han decidido cambiar de rumbo y adoptar un enfoque mucho más pasivo para su problema de relaciones públicas.
Según el nuevo informe del tabloide británico El solHarry y Meghan han decidido declarar una tregua en su guerra de palabras con la familia real.
Fuentes cercanas a la situación aseguran que Harry y Meghan han decidido No para seguir comentando sobre su vida privada y sus relaciones personales.
«Este período de su vida ha terminado, ya que no hay nada que decir», dice una fuente.
La fuente dice que el documental de Netflix marcó el comienzo de la «era de visibilidad» de los Sussex y ahora esperan comenzar un «año de reconciliación» con la familia real.
Es una noticia sorprendente, no solo porque Harry y Meghan parecen haber quemado este puente por completo, sino también porque la pareja hizo un mucho de dinero que cuentan su historia al mundo.
Entonces, ¿cómo se mantendrán los Sussex mientras mantienen este nuevo compromiso con la privacidad?
Bueno, no me quedo sin opciones.
El duque y la duquesa dejaron de publicar en su página oficial de Instagram en marzo de 2020, pero aún tienen 9,4 millones de seguidores y una tasa de participación del 5,82 por ciento.
Los expertos de la industria señalan que si Harry y Meghan publicaran solo 27 publicaciones en un año, podrían ganar $810,000.
Está lejos de los millones que ganaron con sus lucrativos libros y acuerdos televisivos, pero si es un paso hacia la reparación de su relación con la familia real, tal giro podría valer el costo financiero.