Mientras continúa el repudio a la gestión de la presidenta de Perú, Dina Boluarte, la mayoría de los peruanos está de acuerdo en adelantar las elecciones, sin embargo, el Congreso se niega a analizar esta posibilidad.
A poco más de tres meses de que Boluarte asumiera la Presidencia de la República, designado por el parlamento, un estudio reciente indica que el 75% de la población peruana desaprueba la labor del jefe de Estado.
Cabe señalar que, de este porcentaje, el rechazo al presidente se ha incrementado en el sur del país, donde el 95% desaprueba su labor; mientras que en Lima el rechazo al presidente es del 83%.
De igual forma, el presidente del Consejo de Ministros, Alberto Otárola, cuenta con una desaprobación ciudadana del 72%. Solo el 14% considera positivo su trabajo ante la Presidencia del Consejo de Ministros (PCM).
Según la encuesta nacional realizada por la empresa Datum, el 83% de los ciudadanos llama a elecciones anticipadas, mientras que el 14% preferiría que las actuales autoridades terminen su mandato hasta 2026.
El 74% de los peruanos cree que Boluarte debería renunciar al cargo si el Congreso no aprueba elecciones generales anticipadas. El 23% piensa que debería mantenerse hasta 2026.
En cuanto al Congreso de la República, el rechazo es aún mayor: el 87% de la encuesta a nivel nacional dice desaprobar el trabajo de la Representación Nacional; mientras que su aceptación es solo del 8%.
Desde diciembre del año pasado, las bancadas parlamentarias no logran ponerse de acuerdo respecto al contenido que debe tener un proyecto de ley que establezca la reforma de la Constitución para el adelanto de las elecciones generales.
En los últimos meses, desde que Boluarte asumió el cargo el 7 de diciembre de 2022, se ha incrementado el número de protestas en todo el país con una serie de demandas, tales como: la renuncia del jefe de Estado, la clausura del Congreso y el avance de la elecciones.
Más de 60 personas perdieron la vida y más de 1.300 resultaron heridas, según datos de la Defensoría del Pueblo.