El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, anunció este martes una serie de medidas para luchar contra la discriminación racial y reducir las desigualdades históricas que enfrenta la población negra, a pesar de ser la mayoría en el país.
La batería de acciones fue presentada en una ceremonia en el Palacio Planalto, en Brasilia, y busca mejorar la vida de los afrobrasileños en los ámbitos educativo, laboral y religioso, y realzar su memoria, el día que se conmemora el día internacional para luchar contra la discriminación racial.
«Lo que este gobierno hará en los próximos cuatro años será el desarrollo de lo que hicimos cuando creamos, el 21 de marzo de 2003, la Secretaría Especial de Políticas para la Promoción de la Igualdad Racial», dijo Lula, refiriéndose al organismo. implementado en el inicio del primero de sus mandatos.
Entre las iniciativas anunciadas se encuentra un programa específico para garantizar los derechos de las comunidades quilombolas, habitadas por descendientes de esclavos negros, en relación al acceso a la tierra, infraestructura y servicios públicos.
Según estimaciones oficiales, más de un millón de personas en Brasil se declaran quilombolas.
“No descansaremos hasta que ningún negro en Brasil pase por hambre, tiroteos, falta de oportunidades y un racismo sistémico que se profundiza en muchas dimensiones”, dijo la ministra de igualdad racial Anielle Franco en un emotivo discurso.
Lula también decretó la creación de varios grupos de trabajo interministeriales para impulsar proyectos que protejan el «acceso y permanencia de los estudiantes negros» en las universidades y «propongan políticas de cuotas obligatorias» en los órganos de gobierno.
También tienen la misión de desarrollar un programa para reducir los homicidios y la «vulnerabilidad social» entre la juventud negra.