El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, ha calificado de «referéndum» las próximas elecciones presidenciales que se celebrarán en ese país. Aunque no puede ser reelegido, espera la victoria de la candidata del partido, Claudia Sheinbaum, y ha asegurado que estas elecciones van más allá de las autoridades y los partidos electos, ya que ven en ella una oportunidad para definir el proyecto de la nación que los mexicanos queremos.
Las declaraciones del presidente se producen en medio de acusaciones de injerencia de la candidata presidencial de la oposición, Xóchitl Gálvez, quien ha denunciado que López Obrador favorece abiertamente a Sheinbaum en las elecciones. Aunque la ley electoral prohíbe a los funcionarios hablar de campañas y elecciones, el presidente defendió su derecho a hablar de las opciones que enfrenta el país: «la oligarquía y la corrupción» del pasado, versus la transformación del presente.
El domingo, López Obrador esperará el resultado oficial de las elecciones presidenciales antes de hacer su declaración. Además, votará en las primeras horas del día cerca del Palacio Nacional en el centro de la Ciudad de México. Estas elecciones serán las más grandes en la historia de México, con más de 98 millones de electores llamados a renovar más de 20 mil puestos en el gabinete del gobierno mexicano.
Fuente: Medios internacionales
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