Víctimas de toda Colombia se reunieron este lunes y martes en Bogotá, en un encuentro con las delegaciones del Gobierno y el ELN que están negociando la paz, para expresar sus opiniones y la situación en la que se encuentran en conflicto.
Este encuentro, enmarcado en los que realiza en todo el país el Comité Nacional de Participación (CNP) como parte de la dinámica de la negociación, «es diferente».
«Somos las víctimas directas del conflicto armado colombiano que hemos sido escuchadas, para obtener nuestras posiciones y nuestras propuestas que implican ser parte incluidas en todo este proceso», explicó la portavoz de la Mesa Nacional por la Paz, Yolanda Perea.
La activista defendió la necesidad de que víctimas como ella y como las 200 que se reunieron de más de 40 organizaciones sean escuchadas: «En un proceso de paz, en un proceso de diálogo, las mujeres y las víctimas son casi siempre las que terminan». defendiéndolos. causas, por eso tenemos que ser el centro».
Al encuentro también asistieron víctimas directas del accionar del ELN en Colombia, que según Perea, destacó que lo más importante «es lograr el diálogo».
La dirección de las negociaciones.
Las negociaciones entre el ELN y el Gobierno colombiano atraviesan un período de enfriamiento, con casi medio año sin mantener un nuevo ciclo de diálogo, debido a los cruces de acusaciones y tensiones entre las partes.
De todos modos, el mes pasado en Caracas, en una reunión de las delegaciones, lograron acordar firmar el primero de los seis puntos de la agenda de diálogo, que hablaba precisamente del esquema de participación de la sociedad.
Así se desarrolló en estos encuentros con diferentes sectores para ver las formas en que la sociedad puede ser parte del proceso de paz «Han sido más de 60 años de guerra, no podemos pretender que esto se haya resuelto de la noche a la mañana. Aún queda la mediación, «Hay que negociar y hay que hablar», añadió Perea, quien pidió a las partes seguir hablando y continuar el proceso.
«Es importante, primero, que no se levanten de la mesa; segundo, que se mantenga el alto el fuego bilateral; tercero, que trabajemos para frenar estas acciones criminales para que podamos seguir hablando de esa paz», añadió.
Este cese, según Perea, «fue un poco complejo porque sabemos que no sólo el ELN está en los territorios, hay otros actores con los que debemos continuar el diálogo, seguir insistiendo… y entender que cuando hablamos de total Paz, no es La paz del Gobierno es la paz de una Colombia sana que en medio de nuestras diferencias vamos a lograr”.