La posición de China respecto al conflicto en Ucrania será un «factor determinante» en las futuras relaciones entre la Unión Europea y Pekín, ha dicho este jueves la presidenta de la Comisión Europea, Úrsula von der Leyen.
Lejos de verse «oscurecido» por la operación militar rusa en Ucrania, el presidente chino, Xi Jinping, «mantiene una «amistad ilimitada» con Rusia de [Vladímir] Putin», dijo Von der Leyen durante su intervención en un acto. El presidente del país asiático se reunió la semana pasada en Moscú con Putin, a quien le presentó un plan de paz para Ucrania.
Ursula von der Leyen, quien realizará una visita oficial a China la próxima semana con el presidente francés Emmanuel Macron, cree que cualquier plan de paz «viable» debe basarse en los términos de Kiev y no en los de Rusia.
Evitar el ascenso de China
Según el presidente de la Comisión Europea, Xi Jinping tiene el «objetivo claro» de llevar a cabo un «cambio sistémico del orden internacional con Pekín en el centro». “Vimos la muestra de amistad en Moscú que dice más que mil palabras sobre esta nueva visión del orden internacional”, agregó.
En ese sentido, recordó el comentario que el presidente chino le hizo a su homólogo ruso en el momento de su despedida. «Lo más revelador», dijo von der Leyen, «fueron las palabras de despedida del presidente Xi a Putin en las escaleras del Kremlin cuando dijo: ‘Hay cambios que no se han visto en 100 años’. Y juntos somos los que impulsamos estos cambios”, repasó.
«Tenemos que reconocer que el mundo y China han cambiado en los últimos tres años, y necesitamos reevaluar el acuerdo integral de inversión. [entre la UE y Pekín]», instó el funcionario. Los motivos que impulsan la revisión del acuerdo, según Von der Leyen, son la situación en torno a Taiwán, las supuestas violaciones de derechos humanos en la provincia china de Xinjiang contra la minoría uigur o la represión económica contra Lituania.
“Estas crecientes acciones apuntan a una China que se está volviendo más represiva en casa y más asertiva en el extranjero”, dijo. No obstante, añadió que la UE debe seguir cooperando con el gigante asiático, pero que el bloque europeo necesita «nuevas herramientas de defensa» en áreas sensibles como la inteligencia artificial, la computación cuántica y la robótica.
En ese sentido, indicó que más adelante presentará planes sobre posibles restricciones a las inversiones en el país asiático para impedir que el capital y la tecnología de empresas europeas ayuden a mejorar el poderío militar de China.