El Tribunal Superior de Londres optó este martes por posponer su decisión final sobre la apelación en el caso del periodista australiano Julian Assange, fundador del portal WikiLeaks, porque no será extraditado a Estados Unidos de inmediato.
Según la decisión, el tribunal dio al Gobierno de Estados Unidos tres semanas para brindar garantías satisfactorias de que Assange podrá invocar la Primera Enmienda de la Constitución de Estados Unidos, en relación con la protección de la libertad de expresión, en su defensa.
También requerirá garantías de que el australiano no se verá perjudicado en el juicio debido a su nacionalidad, que recibirá la misma protección de la Primera Enmienda que un ciudadano estadounidense y que no estará sujeto a la pena de muerte.
Si no se dan estas garantías, entonces Assange podrá apelar, pero si se ofrecen, las partes tienen la oportunidad de presentar nuevas observaciones en una audiencia el 20 de mayo, para tomar una decisión sobre la apelación.
Sin embargo, los jueces rechazaron algunos motivos de la apelación, incluidos los argumentos de Assange de que su caso está motivado por sus opiniones políticas.
Los jueces evaluarán los argumentos presentados por las partes en dos audiencias judiciales en febrero pasado para decidir si confirman o revocan la decisión emitida el 6 de junio de 2023 por el juez Jonathan Swift.
El año pasado, ese juez negó a Assange la posibilidad de continuar apelando en el Reino Unido y dio su visto bueno a la entrega de Assange a Estados Unidos.
La extradición de Assange fue firmada en junio de 2022 por la entonces ministra del Interior británica, Priti Patel.
Estados Unidos exige la extradición de Assange acusado de 18 cargos de espionaje y piratería informática, tras sus explosivas revelaciones en su sitio web, que entre 2010 y 2011 revelaron presuntos crímenes de guerra estadounidenses en Irak y Afganistán.
Según la defensa de Assange, estos delitos se castigan con 175 años de prisión en Estados Unidos.
Tras conocer la sentencia, la esposa del periodista, Stella Assange, afirmó fuera del tribunal, ante una multitud de seguidores, que su marido es un «preso político».
«Él es periodista y es perseguido porque expuso el verdadero costo de la guerra en vidas humanas» y este caso «es una señal para todos ustedes de que si exponen los intereses que lideran la guerra, ellos vendrán por ustedes». añadió.
Assange fue detenido por primera vez en 2010 a petición de Suecia por un caso que estaba archivado. En 2012 se refugió en la embajada de Ecuador en Londres, pero fue detenido en 2019 por la Policía británica, una vez que el país le retiró el estatus de asilo, y desde entonces se encuentra en prisión.