Las Fuerzas de Defensa de Israel llevaron a cabo lo que optaron por llamar un «ataque dirigido» este viernes en Beirut, capital del Líbano.
Según los informes, el ataque se produjo en la zona de Al Jamous, al sur de la ciudad, durante la hora punta, provocando «muchas pérdidas humanas».
El número de muertos en el ataque aumentó a 14, mientras que el número de heridos llegó a 64, según un informe reciente del Ministerio de Salud libanés. Se informó que nueve personas se encuentran en estado crítico. “Hasta el momento continúa la remoción de escombros”, indicó el organismo.
Medios locales informan que los ataques han impactado los suburbios del sur de la capital libanesa pic.twitter.com/eZdeFIofYd
— Más información (@Sepa_mass) 20 de septiembre de 2024
El atentado tuvo como objetivo un edificio residencial en los suburbios del sur de Beirut, conocido como Dahye y un importante bastión del grupo chiita libanés Hezbolá.
El ataque aéreo israelí mató al comandante de la Fuerza Radwan, Ibrahim Aqil, el segundo al mando de su fuerza armada después de Fuad Shukr, que murió en un ataque israelí en julio pasado.
Una fuente de seguridad citada por Reuters dijo que otros miembros de la unidad de élite Radwan fueron asesinados junto con Ibrahim Aqil mientras mantenían una reunión.
Los días 17 y 18 de septiembre se produjeron explosiones coordinadas de buscapersonas en el Líbano que el grupo chiita Hezbolá atribuyó a Israel.
El líder de Hezbollah, Hassan Nasrallah, describió las explosiones, que mataron a decenas e hirieron a más de 2.500, como una «masacre» y una «declaración de guerra» contra el pueblo libanés. Prometió que Israel recibiría un «castigo justo».
