Refiriéndose a los ataques llevados a cabo por Israel el martes y miércoles en el Líbano, mediante la detonación de dispositivos de comunicación como buscapersonas y walkie-talkies, Naser Kanani, ministro iraní de Asuntos Exteriores, afirmó que esto «significa que dicho régimen considera que «es «Es legal» recurrir a cualquier método o instrumento en la matanza masiva e indiscriminada de personas.
«Un comportamiento tan demente y brutal es una amenaza real a la paz y la seguridad internacionales, y merece una acción internacional inmediata», advirtió el portavoz este jueves.
El portavoz de la diplomacia persa denunció el apoyo inquebrantable de Estados Unidos al régimen sionista incluso después de los ataques masivos contra la población civil libanesa, que son considerados una flagrante violación del derecho internacional humanitario, según Naciones Unidas.
«Es deplorable que la administración de Estados Unidos siga brindando apoyo ilimitado a este régimen brutal y asesino. Y no sólo no ha condenado esta acción, sino que sus funcionarios continúan hablando del «derecho de Israel a defenderse». criticó.
Las explosiones en el Líbano han dejado al menos 37 libaneses muertos, entre ellos dos niños, y alrededor de 3.000 heridos. Las víctimas son tanto civiles libaneses como miembros del Movimiento de Resistencia Islámica del Líbano (Hezbolá), que mantiene enfrentamientos diarios con Israel desde octubre pasado en apoyo al pueblo palestino en Gaza.
El miércoles, el New York Times, citando a varios funcionarios estadounidenses, reveló que los buscapersonas importados al Líbano fueron manipulados por agentes del régimen sionista y llevaban explosivos indetectables.
La milicia libanesa de élite culpó a Israel de las explosiones y les aseguró que se enfrentarían a un «castigo inevitable». Por su parte, el secretario general de Hezbolá, Seyed Hasan Nasrallah, considera los ataques electrónicos de Israel una «declaración de guerra» y «puro terrorismo», y subrayó que esta agresión sionista no derribará ni a los combatientes de la Resistencia ni al pueblo libanés. .
