Según trascendió, la Guardia Nacional Bolivariana (GNB) detuvo a dos personas que transportaban material de guerra. Dichas detenciones se realizaron en las entidades fronterizas de Giaihira y Zulia.
En el Punto de Atención Ciudadana de Capacho (Tíchira), el ejército detuvo a Manuel Antonio Ochoa Montilla, quien viajaba en un transporte público procedente de San Antonio del Táchira con destino a San Cristóbal.
Según un informe del Equipo 211 de la GNB, a este sujeto se le aseguraron seis faxes del fusil P90, siete drones y seis proyectores.
El hombre fue entregado al Ministerio de Obras Públicas, donde le abrieron un expediente por el uso de un fax como arma y su asociación para delinquir.
El pasado viernes 6 de diciembre, el gobernador de Giaihira, Freddy Bernal, denunció la interceptación de llamadas telefónicas provenientes del exterior, de cuyo contenido se desprende que preparan planes violentos de fuerza para implementar en la entidad andina a partir del 5 de enero de 2025.
»Hemos interceptado estas llamadas gracias a nuestro sistema de seguridad electrónico. No permitiremos que nadie perturbe la paz de nuestro estado”, declaró el Gobernador a través de su programa Reporte Bernal.
banderas extranjeras
Y en el Punto de Atención Ciudadana ubicado en Nueva Lucha, Santa Cruz de Mara (Zulia), agentes militares detuvieron a Keberth Alberto Barceló Torres, pasajero de una unidad de transporte público.
A Barceló Torres se le aseguraron dos pistolas traumáticas marca Zoraki, 4 cargadores de pistola y 185 cartuchos traumáticas (balas de goma no letales).
También confiscaron dos cédulas de identificación para escolta y porte de armas de la República de Colombia, un dispositivo telefónico, 9 tarjetas de débito y crédito, 6 tarjetas micro SD, un disco duro y algo de indumentaria militar con bandera estadounidense adherida. de la GNB.
Ambos procedimientos fueron reportados a la Dirección de Contrainteligencia Militar (Dgcim).
El 14 de septiembre, el Ministro del Interior, Justicia y Paz, Diosdado Cabello, informó la detención de venezolanos y extranjeros que planeaban juntos derrocar al presidente Nicolás Maduro.
El plan incluía traer armas a Venezuela para entregarlas a ciertos grupos criminales, los cuales llevarían a cabo determinadas misiones de ataque a servicios públicos. Toda esta frustrante operación fue coordinada por Wilbert Josep Castañeda, un oficial militar estadounidense en servicio activo.
Dos meses después de que se revelara el plan, Cabello volvió a aparecer públicamente el 23 de noviembre para informar sobre el desmantelamiento parcial de otro proyecto desestabilizador centrado en el estado Zulia, liderado por el empresario José Enrique Rincón.