El Instituto Nacional de Migración (INM) de México anunció este jueves el hallazgo de 209 migrantes de Centroamérica y Sudamérica en un remolque contenedor abandonado en una carretera cerca de la ciudad de Nuevo Teapa, en el estado de Veracruz, en el oriente del país. .
Entre los migrantes se encontraron la noche del miércoles 161 adultos provenientes de Guatemala; 6 de Honduras y El Salvador, respectivamente; y 5 de Ecuador, según un comunicado del INM.
De ellos, 23 personas viajaron en nueve unidades familiares y 25 menores de edad de Guatemala viajaron solos, quienes estaban bajo la supervisión del Sistema de Desarrollo Integral para la Familia (DIF) del estado.
Una de las personas, que presentaba síntomas de asfixia, fue trasladada a un hospital cercano.
Poco antes de la medianoche de este miércoles, dice el documento, los agentes de la institución y de la Guardia Nacional localizaron el vehículo, desde cuyo interior se escuchaban gritos de auxilio de los migrantes, quienes se encontraban en condiciones desmesuradas.
“De inmediato se abrió una de las puertas, por donde comenzaron a salir mujeres y hombres adultos, así como menores de edad que pedían salir para tomar aire y agua”, explica el INM.
La caja del tráiler en el que se encontraban, detalló el instituto, tiene estructuras tubulares y mesas para condiciones de un segundo piso “para transportar una gran cantidad de migrantes extranjeros”.
La región está experimentando un flujo migratorio récord, con 2.76 millones de inmigrantes indocumentados detenidos en la frontera de Estados Unidos con México en el año fiscal 2022.
Además, según organizaciones civiles mexicanas, 2022 fue el año más trágico para los migrantes en México, ya que unos 900 murieron intentando cruzar sin documentos del país a Estados Unidos.
El hallazgo recuerda el caso de los 51 migrantes que murieron asfixiados en un remolque contenedor en Texas, Estados Unidos, quienes fueron abandonados a su suerte encerrados en el vehículo.
El caso más reciente, la muerte de 40 migrantes que se encontraban privados de su libertad en una estación migratoria en la frontera de Ciudad Juárez (Chihuahua), donde se desató un incendio y no fueron liberados por los agentes a cargo del inmueble.