Gleyber Torres se convirtió en el principal referente ofensivo de los Yankees de Nueva York, en su lucha por ascender y hacerse con un puesto en postemporada desde el último puesto del Este de la Liga Americana.
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Y reacciona fuertemente. La semana pasada, conectó tres jonrones para un total de 16, y con las carreras impulsadas de sus varios hits, llegó a 43.
Ese número está muy lejos de los 77 del líder Shohei Ohtani, pero dice mucho a favor de Torres en un equipo con problemas ofensivos obvios, que ha subido en la alineación en las últimas semanas y está produciendo con sus hits.
Mirando las estadísticas de su equipo, figura primero en promedio con un .264, las carreras impulsadas antes mencionadas y en hits con 98. Es segundo en jonrones detrás de los 19 de Aaron Judge, solo la primera tarjeta de poder de los Yankees en estar fuera de acción y aún no tiene fecha de regreso.
El calor de julio le ha venido bien al caraqueño, que ha concedido al menos un hit en 13 partidos consecutivos. Los Yankees ahora confían más en él.