El lunes, las fuerzas militares israelíes mataron a un palestino de 15 años durante un asalto al campo de refugiados de Aqabat Jabr, ubicado en Cisjordania.
Según la redacción de Prensa Latina, el asalto también dejó dos jóvenes heridos.
El joven, que se hace llamar Mohammad Fayez Balhan, fue alcanzado por balas en la cabeza, el pecho y el estómago.
Según medios locales, el ejército allanó la localidad para detener a los militantes, pero fue confrontado por sus habitantes.
En respuesta, los uniformados abrieron fuego contra los manifestantes, dos de los cuales resultaron heridos.
Este es uno de los dos ataques registrados este lunes.
Las fuerzas palestinas también atacaron a los palestinos en la aldea de Beit Ummar, cerca de la ciudad de Hebrón, en el sur de Cisjordania, dejando a decenas de personas asfixiadas por gases lacrimógenos.
Israel admite uso excesivo contra la mezquita de Al-Aqsa
Por su parte, las autoridades policiales israelíes admitieron este domingo el uso excesivo de la fuerza por parte de las tropas de ocupación sionistas contra los palestinos durante el asalto a la mezquita de Al-Aqsa en Al-Quds.
Las declaraciones fueron hechas por el jefe de la policía israelí, Kobi Shabtai, quien aceptó el alto nivel de brutalidad llevado a cabo por las fuerzas de Tel Aviv en el contexto de los allanamientos realizados en el sitio sagrado, informa TeleSur.
No obstante, afirmó que la intervención de la policía en la Mezquita, aunque aseguró que las fuerzas de ocupación se han «vencido un poco» con la violencia.
Este hecho tuvo lugar a principios de abril, donde al menos 300 personas resultaron heridas en el enfrentamiento posterior a la invasión, con gases lacrimógenos y granadas aturdidoras lanzadas por las fuerzas israelíes para desalojar a los ocupantes del recinto.