La calidad de Freddy Fermín tanto con el bate como con el guante le ha permitido tener un estatus destacado como receptor suplente de los Kansas City Royals, y más aún con Salvador Pérez como su mentor.
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Ahora «Manao» ha pegado al menos un hit en cinco de los últimos seis partidos. En ese lapso, bateó .400; Producto de 10 esquivas en 25 turnos. Además de un jonrón, seis carreras impulsadas, una anotada, OBP de .423, Slugging de .520 y OPS de .943 en 27 apariciones al plato.
Pero la cosa no se queda ahí, ya que repite la buena ofensiva desde el 18 de junio. Tiene un promedio de .320 (de 100 a 32), con un OBP de .364, un slugging de .470 y un slugging de .834. Así, ha demostrado que su perseverancia está ahí para dar dividendos y ser útil a su equipo.
De hecho, los receptores de los Kansas City Royals se combinan para lograr el segundo promedio de bateo más alto desde esa posición en la Liga Americana (.287), solo detrás de los Houston Astros (.288).
Además, son líderes del circuito en carreras impulsadas (105), jonrones (26); de los cuales seis son cortesía de Freddy Fermín, y 76 están anotados.
