Durante la urbanización de Los Chorros, municipio Sucre en el estado Miranda, varios vecinos se organizaron en lo que muchos consideraron un innovador proyecto de cría de cerdos en pleno municipio caraqueño.
Así lo destacó Zulema Pedroza, integrante de una de las tres Unidades de Producción Familiar (UPF) de la Unidad de Producción de Porcicultura Apacuana. Este 2021, el grupo liderado por siete personas, en su mayoría mujeres de la región capital, tiene como objetivo brindar seguridad alimentaria a la población de la Comuna de Apacuana.
Pedroza dijo que este proyecto surgió como una solución para garantizar que las personas de la comunidad tuvieran acceso a carne de cerdo, ante la crisis que afectó a las familias venezolanas durante la fase más aguda de la pandemia de Covid-19.
De esta forma, el proyecto liderado por socios locales ha comenzado a destacarse como una iniciativa pionera en la región.
Enfatizó que el objetivo principal del proyecto es brindar a la comunidad este producto a un precio más accesible que el precio en el mercado tradicional.
Fabricar
Voceros del Poder Popular decidieron adquirir ganado en pie en el estado Guárico para comenzar a producir carne de calidad.
De esta experiencia, dijo Pedroza, surgió la idea de incursionar en la cría de cerdos, comenzando con cuatro cerdos, que con el tiempo se fueron multiplicando hasta llegar a una población de aproximadamente 20 cerdos.
Inicialmente, este grupo de empresarios estaba interesado en aumentar el número de cabezas para producir mayores cantidades de proteína. Para ello trabajaron duro en la producción, enfatizó Pedroza en entrevista con el equipo de Últimas Noticias.
Continúan produciendo carne que luego se vende a los habitantes del territorio de los 15 consejos comunales que conforman la Comuna de Apacuana.
Pedroza asegura que el objetivo es incrementar la producción para poder ampliar el alcance del suministro.
Además, dijo que para lograr el objetivo se han implementado medidas de mejora genética y cuidados diarios, en colaboración con estudiantes de Veterinaria de la Universidad Simón Rodríguez, en tareas como desparasitación y vacunación.
Señala que los animales tienen una dieta equilibrada y libre de alimentos procesados. Los cerdos comen, entre otras cosas, verduras.
Desafío
Pedroza explicó que uno de los principales retos que enfrentan es la falta de médicos veterinarios especializados en la zona. Básicamente, porque gran parte de los profesionales se dedican al cuidado de este tipo de especies en espacios convencionales, y la asociación que lideran, junto con sus compañeros, está ubicada en una zona urbana.
Por otro lado, iniciar el proyecto en medio de una urbanización como Los Chorros generó desafíos adicionales. Sin embargo, el equipo detrás de este emprendimiento ha demostrado su compromiso con el bienestar de la comunidad.
Según Pedroza, la gente de esta zona ha encontrado en este proyecto una fuente confiable de carne de cerdo fresca y de calidad, gracias al esfuerzo colectivo de sus creadores, así como de sus aliados externos.
Con una visión enfocada en la sustentabilidad y el cuidado del medio ambiente, la porcicultura de Apacuana es considerada un ejemplo de iniciativa local que tiene un impacto económico y social positivo.
Se espera que este sector productivo social, nacido de las necesidades y determinación de la gente, sea un modelo para otras comunidades urbanas del país que busquen alternativas para incrementar la seguridad alimentaria.