El empresario Elon Musk atacó a Alexandre de Moraes, uno de los diez jueces del Supremo Tribunal Federal (STF) de Brasil. En una serie de publicaciones, le preguntó al juez. El enfrentamiento entre Musk y el STF se produce después de que Moraes incluyera al magnate en la investigación sobre la existencia de redes dedicadas a la difusión de noticias falsas y «ataques» a la democracia y la supuesta «manipulación deliberada» de la plataforma X.
Todo comenzó el 6 de abril, cuando la red X afirmó que se había visto obligada a «bloquear algunas cuentas populares en Brasil» por decisión judicial. Posteriormente, el millonario aseguró que levantará todas las restricciones impuestas por la Justicia, pese a las posibles consecuencias, «como forma de luchar contra la censura».
Moraes, uno de los miembros de la Corte Suprema, es el máximo exponente de la apertura de la investigación y responsable de un proceso que aborda el uso de las redes sociales para la difusión de noticias falsas y ataques a la democracia.
Musk afirmó que «este juez impuso fuertes multas, amenazó con arrestar a nuestros empleados y bloquear el acceso a X en Brasil. Probablemente tendremos que cerrar nuestra oficina en Brasil, pero los principios son más importantes que los beneficios».
Luego de estos ataques, Moraes ordenó a la policía federal abrir una investigación contra Musk por obstrucción a la justicia e incitación a delinquir. Además, solicitó que se investigue al multimillonario tecnológico como parte de la investigación sobre la existencia de las llamadas «milicias digitales antidemocráticas» y su financiación.
Para los expertos en fake news, las últimas declaraciones de Elon Musk claramente van demasiado lejos. «Si hubiera habido una violación de la Constitución, Musk tendría que ser aclarado ante los tribunales», explica la abogada Yasmin Curzi, profesora de la Universidad Fundação Getulio Vargas de Río de Janeiro.
Fuente: Medios internacionales
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