La Casa Blanca dijo el martes que no apoya los ataques en Rusia ni el uso de equipos estadounidenses para llevarlos a cabo, luego del primer ataque masivo con drones contra Moscú, que las autoridades rusas atribuyeron a Ucrania.
Consultada sobre la posibilidad de que drones estadounidenses estuvieran involucrados en ese ataque, la vocera del gobierno estadounidense Karine-Jean Pierre indicó que aún están recabando información para ver qué pasó y “obtener una mejor perspectiva y algo de claridad sobre lo que pasó”.
“Pero puedo hablar de esto de manera general y como un tema general, y como dijimos antes, no apoyamos los ataques en Rusia”, dijo Jean-Pierre en su rueda de prensa diaria.
La portavoz destacó que Estados Unidos está enfocado en brindar ayuda a Ucrania para recuperar su territorio soberano: “Y esto es exactamente lo que hemos estado haciendo durante el último año”.
Agregó que Washington no apoya el uso de equipo estadounidense para realizar agresiones en territorio ruso, al tiempo que señaló que ha sido muy claro al respecto en público y en privado con los ucranianos.
La capital rusa sufrió este martes el primer ataque masivo con drones, que no dejó víctimas mortales. En tanto, en Kiev, sus habitantes sufrieron la tercera noche consecutiva de bombardeos con drones, que causaron al menos un muerto.
El portavoz de la Fuerza Aérea de Ucrania, Yuriy Ignat, dijo que el ataque del martes a Moscú fue una consecuencia de los «problemas internos» de Rusia y podría haber sido llevado a cabo por grupos de oposición rusos que buscan devolver al presidente ruso, Vladimir Putin.