Todo un escándalo se desató en España luego de que Doritos decidiera despedir a la famosa influencer transgénero Samantha Hudson.
Hace unos días, la famosa marca lanzó en redes sociales un video de su nueva campaña, en el que aparecía una influencer y activista trans.
Todo iba bien, cuando de repente las redes sociales se inundaron de tuits extremadamente ofensivos e inusuales publicados por un influencer en 2015.
A medida que crecía la controversia, Doritos recibió cientos de críticas por su colaboración con Samantha Hudson.
Al mismo tiempo, aparecieron mensajes cada vez más controvertidos y bastante inapropiados.
Los más escandalosos defendieron la pedofilia por obvias referencias a menores.
«Quiero robarme el culo a una niña de 12 años» se convirtió en uno de los mensajes controvertidos.
Sin embargo, fue él quien sacó su enojo:
“Simplemente froté mi lengua en la vagina de mi prima pequeña y ella me sonrió. «Los pequeños también merecen disfrutar», publicó en su momento.
No ofensivo, sino CRIMINAL. Es una mala persona y Doritos no tiene moral. pic.twitter.com/Yac0wggz0f
— Cesc Núñez (@cescgalietti) 5 de marzo de 2024
En medio del escándalo, la relación con Doritos no quedó del todo clara; Pero poco después, la revista Rolling Stones aseguró que la marca sólo aprobaba una «colaboración única».
Al final, el vídeo fue eliminado de las cuentas de Doritos.
SU REACCIÓN AL ESCÁNDALO
En medio de un escándalo con una activista trans, ella negó haber publicado un mensaje en el que hablaba de su prima menor, a pesar de conocer a otras personas.
«Independientemente de cuando los escribí el era menor de edadEn un contexto donde la tendencia general de las redes sociales es hacer el humor negro más brutal y escandaloso que se pueda, creo que son desagradables e inapropiadas», afirmó.
Destacó que no los escribió en serio, sino que sólo ironizó sobre posiciones éticas y moralmente correctas.
También dijo que todos los críticos utilizan estos mensajes. para «atacar» su «identidad de género».
También cree que se intenta «crear una historia pervertida» para acusarle de «pedofilia».