Algunos síntomas deben ser considerados al momento de evaluar la existencia de esta patología, porque puede ser tratada y ayudar a prevenir su progresión.
Los trastornos neurocognitivos son un grupo de afecciones que afectan la función cognitiva, y se caracterizan por una alteración de diversos procesos psicológicos básicos como la percepción, la atención, la memoria y otras capacidades cognitivas.
Suelen ser más comunes en adultos mayores, pero también pueden afectar a personas jóvenes.
Debido a que afecta mucho a la persona, es importante que, desde el punto de vista médico, se puedan evaluar primero los trastornos neurocognitivos porque, en muchos casos, al hacerlo a tiempo, se pueden tratar y manejar los síntomas de manera efectiva. Se pueden identificar los factores de riesgo y las causas subyacentes de la patología, lo que puede ayudar a prevenir su progresión.
También puede ayudar a las personas a planificar y prepararse para el futuro, lo que puede ser especialmente importante en el caso de enfermedades neurodegenerativas como la enfermedad de Alzheimer.
Por ello, desde el Centro de Residencia y Atención Integral a adultos mayores con trastornos neurocognitivos, Hogar La Ponderosa, advierten a las personas que puedan tener signos o síntomas que los lleven a pensar que presentan alteraciones tempranas de los trastornos neurocognitivos, por lo que, ser evaluados para excluir o detectar esta condición a tiempo.
Posibles síntomas
Algunos de los primeros síntomas de los trastornos neurocognitivos pueden incluir:
• Dolores de cabeza, especialmente en personas con conmoción cerebral o trastorno craneocerebral.
• Incapacidad para lograr el enfoque o la concentración.
• Pérdida de la memoria a corto plazo.
• Dificultad para realizar actividades diarias rutinarias.
• Alteraciones de la marcha y del equilibrio, entre otras.
Diagnóstico correcto
Es importante recordar que estos síntomas pueden ser causados por muchas otras condiciones, y que sólo un médico puede hacer un diagnóstico certero y será quien determine si realmente se trata de un caso de trastorno neurocognitivo.
Alteraciones de la memoria, cambios constantes de comportamiento, dificultades en la comunicación y en la capacidad de realizar las actividades diarias; Pueden ser signos de conducta neurocognitiva alterada. presione soltar