La alcaldía de Valencia, a través del alcalde Julio Fuenmayor, inaugurará el próximo 24 de julio, con toda la majestuosidad posible y en medio de una gran expectativa, la plaza de Bolívar que ha sido remodelada, transformada y embellecida, permitiría, entre otros fines, homenajear al Libertador y expresar su relación con la ciudad, a través de los distintos monumentos y espacios que el diseño pretendía.
Ese día, los valencianos despejarán la incógnita que esconde una especie de tapadera que, en poco más de un año, se ha extendido por toda la plaza. Unos pocos asomaron con curiosidad los ojos por ciertas rendijas o agujeros en la lona, para ver si se habían topado con algo del trabajo de remodelación. En algún lugar de la superficie había una valla publicitaria pintada de verde, con una figura levantando el brazo izquierdo, junto al cartel «Plan Búho». En el lienzo apenas se ve el monolito de Bolívar y al fondo la cúpula de la catedral.
La nueva Plaza de Bolívar marcará un hito importante en Valencia, en cuanto al rescate del centro histórico, que pretende devolverle su señorío, su esplendor, pero más allá, devolverle el orgullo a los valencianos, el sentimiento de pertenencia a la ciudad. los vio cobrar vida y comparó la importancia de una ciudad que ha jugado un papel destacado en la epopeya y la historia de Venezuela. Esta es la convicción y el testimonio de, por un lado, Dalia Correa, presidenta de la Fundación Turismo, Fundatur, y del Centro de Artes Vivas Alexis Mujica, ambos organismos de la Alcaldía de Valencia, y por otro, Nelson Sira. Sánchez, director de Apoyo Estratégico a las Políticas Públicas de la Alcaldía de Valencia.
Dalia Correa y Nelson Sira Sánchez coinciden en que la remodelación de la Plaza Bolívar forma parte de una propuesta de transformación del centro histórico de Valencia; Nueva Valencia está en marcha.
Correa insiste en que primero buscan darle el verdadero sentido a la plaza de Bolívar, en una ciudad como Valencia, abierta al mundo, una ciudad proyectada para el encuentro, una ciudad con mercado. El cacique está empeñado en reiniciar esa carga histórica. ciudad, se refuerzan sus valores identitarios.
“La idea es que la Plaza de Bolívar siga con su magnificencia de siempre, con sanitarios, con bancas para que la gente se siente, un espacio de reunión familiar, una plaza con una vegetación acogedora, la gente vaya, comparta, interactúe y que Simón Bolívar, nuestro Libertador, tiene una presencia permanente, pero no sola arriba, en ese monolito inaccesible. Precisamente, el proyecto contempla varias estaciones, en las que Bolívar aparece fuertemente en el escenario, asociado a la época de El Libertador en Valencia, para que las personas puedan interactuar con los diferentes personajes históricos colocados en los diferentes espacios de la plaza. Es un espacio diseñado para reforzar la identidad histórica, para fortalecer a Simón Bolívar, para resaltar las libertades de Venezuela”, dijo Dalia Correa, desde la sede del Centro de Artes Vivas Alexis Mujica, ubicado justo afuera de la Plaza de Bolívar. En el espacio del centro de arte, que también es la sede de Fundatur, se exhibe al público toda la remodelación propuesta.
Nelson Sira Sánchez detalla que el centro histórico valenciano tiene una superficie de 222 hectáreas y que tiene una serie de atributos muy importantes, pues conserva el perfecto entramado de Indian Law por el que los españoles conquistan Nha ha establecido ciudades y pueblos en América . Dice Sira Sánchez que en una imagen de satélite, o en un vuelo de dron, se puede ver la red y distribución de energía, partiendo de la plaza que es el nicho fundador. Allí, cerca, estaba el poder religioso, el poder institucional con el ayuntamiento y luego el ciudadano civil como plaza pública.
“Para la restauración de la plaza, el alcalde Julio Fuenmayor consultó a los arquitectos, con la Academia de la Historia elaboró un proyecto que involucró a mucha gente. La idea es que los ciudadanos que disfruten y visiten la plaza vivan una experiencia educativa en torno a Bolívar en Valencia, recreada interactivamente”, dijo Sira Sánchez, desde la Casa Pocaterra, donde visitó, una vivienda que funciona como sede del Ministerio de Cultura, dijo . de la alcaldía.
Consultar con José Gregorio
El proyecto de remodelación de la plaza, como se demuestra en el Centro de Artes Vivas Alexis Mujica y explicado por Dalia Correa, contempla varias áreas o espacios que son: monolito, retiro, banderas de altar, monumentos digitales, áreas ceremoniales. Son diez monumentos o estaciones, realizados en bajorrelieve, que reflejan la conexión o relación entre Bolívar y Valencia. Estos son Bolívar y Miranda, Bolívar y Girardot, Bolívar, la catedral; Bolívar y Urdaneta, Bolívar y héroes, Bolívar y Manuel Cedeño, cabildo, Bolívar y Páez, noche oscura, heroínas.
Algunos hechos históricos sobre la relación de Bolívar con Valencia. Por ejemplo, el 23 de julio de 1811, un joven caraqueño fue fusilado en la Batalla del Morro de San Blas, acto patriótico victorioso que culminó con el primer izado de la bandera tricolor en la plaza. Bolívar y Páez se conocieron en Valencia, cuando El Libertador visitó por última vez Venezuela en un intento por desactivar el conflicto y evitar la desintegración de Colombia, la nación nacida en Angostura, a orillas del río Orinoco.
“Nosotros —dijo Sira Sánchez— tenemos una carga histórica importante. Bolívar terminó en Campo Carabobo, naciéndonos como república y siete días después fundó la primera asamblea civil de Venezuela, en Valencia, frente a la plaza. Somos pioneros en el gobierno local para Libertador”.
El propósito de rescatar el centro histórico de Valencia no se limita a la Plaza Bolívar. La restauración de los edificios de la finca lleva varios años, incluso con el anterior alcalde, Alejandro Malvez. Dalia y Sira, que integran el grupo del alcalde Julio Fuenmayor, enumeran el conjunto de importantes edificios y espacios que han sido rescatados: la iglesia de San Francisco, casa natal de Rafael Pocaterra, ilustre escritor e intelectual valenciano, autor de «Memorias de un venezolano en decadencia”. Pocaterra fue el primer embajador de Venezuela ante la Unión Soviética. Asimismo, se ha restaurado el Teatro Municipal, la Catedral, la Iglesia de la Candelaria, al sur de la ciudad; el Centro de Interpretación Histórica de la Universidad de Carabobo, donde se encuentra la alcaldía de Valencia intervenida, se acaba de instalar el Museo Nelson Mandela, el parque municipal de Filas de la Guacamaya, al poniente de la ciudad, donde el año pasado se reconstruyó la Cruz de Constantino. de Casa Pocaterra, en un espacio abandonado,
En una de las paredes del vestíbulo o corredor de la Casa Pocaterra está escrito un fragmento de la novela. Memorias de un venezolano en decadenciaen el que el escritor registra sus recuerdos de infancia en esa ciudad provinciana.
“La casa donde vivíamos en ese momento tenía una enredadera grande, una pequeña flor blanca que la gente llama velo de novia. Un trepador pródigo cubrió la romanilla del comedor… En una esquina del mantel, el sol trazaba la sombra de una enredadera; Cerca había una taza grande, rayada de azul con borde dorado, dentro había café hirviendo, una pequeña jarra de metal con leche; una larga bandeja de pan a la que el tiempo le ha quitado su ferocidad, convirtiéndola en una mancha ocre, la imagen de un guerrero japonés estampada en el fondo… y resonaba una voz querida, con un tono ya mil veces oído desde una infancia lejana :
—Ven, el desayuno está aquí….
La Iglesia de San Francisco es el actual santuario del Beato José Gregorio Hernández. El camino que pasa adelante, Colombia, es una avenida. En la acera, sentado en una silla de metal, está el «santo de los pobres», vestido de médico, con un estetoscopio en la mano extendida. Allí, transeúntes y devotos se toman selfies, colocándose estetoscopios en el corazón, como si estuvieran consultando.
“La Plaza Bicentenario, frente a la casa de Pocasterra, fue inaugurada hace menos de año y medio; es un lugar hostil. Ahora puedes disfrutar de un espacio de encuentro, diseñado de forma histórica. Existe una réplica de la espada que usó Bolívar en la batalla de Carabobo y se la regaló a Urdaneta en su momento. Recientemente, el 2 de febrero, recibimos la visita del Embajador de Rusia. Se colocó una placa conmemorativa del 80 aniversario de la Batalla de Stalingrado, la batalla decisiva para liberar al mundo del fascismo; Esa señal fue dada por el pueblo de Rusia. Plaza Bicentenario es un recinto multifuncional ya que cuenta con instalaciones para el juego diario, niños y adultos, balcón y seguridad. También cuenta con espacios rituales y de protocolo; Es un regalo muy bonito para la ciudad”, comentó Sira Sánchez.
valencia del pueblo
Dalia Correa destaca que estas iniciativas crean un dinamismo que impregna la ciudad, e incluso con la participación entusiasta de jóvenes y muchas organizaciones. Habla de las actividades que realiza el Centro de las Artes Vivas, como punto de encuentro de la cultura, los foros de todos los jueves en los que se tratan diversos temas, desde fotos en Valencia, gastronomía y otros temas de interés.
“Se trata de encontrar colores locales, sabores locales, experiencias propias que, ante todo, nos den sentido de pertenencia, uniéndonos desde diferentes puntos de vista en una unidad de identidad, pero también de fortalecer la capacidad real de mostrar la mundo, no sólo a personas de otros estados del país. Así como San Agustín en Caracas es atractivo para los turistas, el centro de Caracas es tan hermoso, queremos que Valencia sea reconocida por los turistas, además de que tenemos una rica historia. No muy lejos tenemos el Campo de Carabobo, que es el recurso, el atractivo del país, entonces alcanzamos todo nuestro potencial, estamos armando el coraje para poder decir aquí estamos y seguiremos estando, donde A Venezuela se le da libertad”, señaló.
Sira Fernández agregó que hay una política integral que busca vincular el centro histórico como un lugar de convivencia, de encuentro, de depurar del imaginario general que la connotación negativa del centro es un espacio inseguro, maloliente, sucio, feo. ubicación. Es parte de la estrategia para hacer de ella, como toda ciudad que se precie, un centro histórico, cuna de la ciudad, un lugar de turismo nacional e internacional”.
Dalia Correa insiste en que con el centro de Valencia tienen que buscar la manera de hacer como en Caracas, que es muy bonita, con la restauración de teatros, plazas, espacios públicos. En este sentido, hubo que convencer a algunos reacios o conservadores de que se estaba aludiendo a la valencianidad, un concepto un tanto excluyente.
“Soy el orador del Día del Orden de la Ciudad, el 25 de marzo. El discurso se tituló De la Valencia del Rey a la Valencia del Pueblo. Alguien me dijo que al principio le sorprendió el título del discurso, pero luego, cuando se detalló el sentido amplio, se sintió satisfecha… Hoy en día, no se trata solo de qué es la gestión urbana y hacia dónde se dirige el público. también es importante políticas, en este caso, la revalorización del centro histórico, pero también diversas organizaciones privadas, entre ellas Fedecámaras, han comprado un predio para mudarse al centro de la ciudad. “Admiro lo que está pasando en mi ciudad, porque el centro vuelve a ser un lugar de encuentro”, dijo la nueva presidenta de Fedecámaras, quien por primera vez es mujer, Ana Isabel Taboada.