Javier Milei es protagonista de un hecho histórico: es el primer presidente argentino que, por primera vez en la historia, vio rechazado por el Congreso un Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU). En este caso, fue el Senado el que selló la derrota del Ejecutivo con 49 votos contra 11 para negar el DNU que otorga fondos millonarios reservados para la Secretaría de Inteligencia del Estado (SIDE).
Desde la Casa Rosada se emitió un airado comunicado rechazando la decisión legislativa.
«La Presidencia condena el voto irresponsable de un grupo de legisladores que dejaron sin recursos al sistema de inteligencia argentino en un momento histórico del país», dice el comunicado oficial que responsabiliza al kirchnerismo y al radicalismo de «cualquier hecho que ocurra hasta esa SIDE». está debidamente financiado».
En un intento por salirse con la suya, la Casa Rosada propuso una estrategia para evitar que el tratamiento DNU llegue al lugar. La medida fue propuesta por la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, en una reunión en Casa Rosada encabezada por Milei el miércoles pasado. La acción consistió en solicitar una sesión secreta especial con el objetivo de sacar de la agenda oficial el DNU de la SIDE.
La solicitud ingresó ayer por la tarde al Senado y fue recibida por la vicepresidenta Victoria Villarruel quien la puso a consideración desde los bloques.
Esto permitió que el pedido del Ejecutivo se mantuviera en minoría y el DNU se sumara al plan de sesiones que se aprobó en la reunión de trabajo parlamentario con el apoyo del kirchnerismo, obteniendo los dos tercios necesarios para implementar la medida.
La petición de Milei
A través del decreto 656 de Necesidad y Urgencia firmado por el Presidente de la Nación, Javier Milei, y todos los ministros del poder, se estableció que en el presupuesto se destinará la suma de 100.000.000.000 de pesos para el refuerzo del Sistema de Inteligencia Nacional.
Además, se estableció el “carácter reservado” de los fondos asignados a la SIDE y se estableció que la decisión será comunicada a la Comisión Bicameral para el control del DNU del Congreso Nacional.
En los fundamentos del DNU se señala que la decisión se fundamenta en que actualmente se maneja con un Presupuesto ampliado al 2023, lo que significa que la nueva estructura no prevé estos recursos.