Ocho personas han muerto y 19 están desaparecidas como resultado de una tormenta de invierno en el estado brasileño de Rio Grande do Sul.
Los expertos dijeron que la tormenta era un ciclón extratropical, un meteoro que es más común en latitudes medias y altas que en los trópicos.
El gobernador Eduardo Leite dijo que uno de los muertos era un bebé de cuatro meses que los rescatistas no pudieron salvar. Hubo muertes en siete ciudades.
«Desde el jueves por la noche hasta ahora, este primer momento se trata especialmente de proteger la vida humana, apoyar y salvar a las personas», dijo Leite en una conferencia de prensa con otros funcionarios.
Dos ministros del gobierno del presidente Luiz Inácio Lula da Silva fueron al estado para organizar inversiones y apoyo a Rio Grande do Sul y ciudades en estado crítico. También irán al estado de Santa Catarina, que se ha visto afectado por las inundaciones.
Los bomberos realizaron 2.400 operaciones de rescate en 35 ciudades de Rio Grande do Sul afectadas por la tormenta.
Se cerraron varias carreteras, se cancelaron vuelos a las principales ciudades el viernes y se cortó la energía en todo el estado.
Agentes estatales estaban inspeccionando caminos y puentes dañados para restaurar el acceso a las áreas más afectadas, dijo Leite.
El alcalde de Maquine dijo en las redes sociales que las precipitaciones superaron los 29,4 centímetros (11 pulgadas) en un día.
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