El gobierno colombiano instaló un retén migratorio en Tibú, en el norteño departamento de Santander, en la frontera con Venezuela, para fortalecer la presencia del Estado en esta región golpeada por la violencia.
El director de Migración Colombia, Fernando García, dijo que el objetivo de este cargo es atender los “procesos de movilidad e integración y generar estrategias de prevención frente a la vulneración de los derechos de las personas migrantes y poblaciones de acogida”.
A través de un comunicado, agregó que el puesto pretende “servir, con información a la población venezolana, el servicio de biometría y la entrega de Permisos de Protección Temporal”.
La activación de este retén coincide con la reunión que Gustavo Petro, presidente de Colombia, sostuvo con su homólogo venezolano Nicolás Maduro en Caracas, con el fin de revisar las relaciones bilaterales.
Agencias
