No debería sorprender la debacle de las selecciones venezolanas en la Copa Libertadores y Copa Suramericana. Si bien siempre existe la ilusión de competir y pelear en los torneos de la Conmebol, la pura y dura realidad en la cancha ha sido devastadora para Caracas FC, Deportivo Táchira, Metropolitanos y Rayo Zuliano. Ocho derrotas, 24 goles en contra y sólo tres a favor es el aplastante resumen estadístico de las dos primeras jornadas del representativo de la Liga Futve en la presente temporada copero.
No había mucho que esperar de Caracas. Desde la desaparición física de su patrón, Guillermo Valentín, el equipo tuvo que cambiar su dinámica financiera. Dejó de ser el equipo con más músculo financiero para fichar jugadores nacionales e internacionales, se concentró en las categorías menores para formar talento para la exportación y el principal objetivo ni siquiera es ganar títulos nacionales, sino clasificar a los torneos de la Conmebol para tener ingresos. en dolares.
Puede que no estés de acuerdo con esta nueva visión institucional de los rojos, pero así es como ha operado Caracas y es poco probable que cambie de rumbo. El problema es que no se puede competir en Sudamérica con un equipo que quedó desmantelado, habiendo vendido o prestado a los principales referentes en el ataque, y la responsabilidad de salir a la batalla quedó en manos de algunos pibes que están creciendo como Renné Rivas, Bryant Ortega. o Ender Echenique. Por tanto, no sorprende que Caracas esté viviendo la peor temporada de su exitosa historia tanto en la Liga Futve como en la Libertadores.
Se esperaba más pelea del Táchira de Saragó por su gran desempeño la temporada pasada con 34 partidos invicto y posesión de un fútbol, sólido en el fondo del campo, combinación, precisión y eficiencia en hacer daño que invitaba al sueño de verlo superar a Venezuela. Pero el panorama que se dio en las derrotas en casa (0-2) ante River Plate en Argentina y fuera (3-0) ante Libertad de Paraguay estuvo muy lejos de lo que había mostrado el equipo aurinegro durante su brillante última temporada.
El equipo de Saragó apenas tocó el área rival en ambos encuentros. la omnipresencia de Maurice Cova para adueñarse del centro del campo y marcar el ritmo de los partidos con sus toques cortos y largos o sorprender con sus potentes tiros de media distancia; la profundidad que siempre aporta Nelson Hernández; y el desequilibrio provocado por Yerson Chacón conduciendo a toda velocidad para romper líneas desapareció en Pueblo Nuevo y en el Estadio La Huerta de Asunción.
Sin embargo, todavía hay esperanzas de que en su regreso al Santo Templo de San Cristóbal, en los duelos respectivamente contra Libertad de Nacional en Uruguay, el Táchira vuelva a ser el equipo proactivo y tendrá más audacia para mantenerse firme y sumar puntos.
A pesar de las dos derrotas en la Suramericana, los Metropolitanos han sido el equipo que mejor se ha desempeñado. Merecieron sacar al menos un punto en la visita al (3-2) Garcilaso, pero los 3.300 metros sobre el nivel del mar en el estadio cusqueño ahogaron el violín en los minutos finales, cuando necesitaban resistir. En la derrota en el Olímpico (0-2) ante Cuiabá, también intentó llegar a la portería rival con más empuje que ideas, recurriendo a una repetitiva andanada de centros que los brasileños supieron controlar.
Del Rayo Zuliano se conoció que su presencia sería testimonio. El gran logro de la joven institución del Catatumbo fue la clasificación a la Copa Suramericana en su debut en primera división. Más que triunfos, lo que debemos esperar del equipo rayado es que se consolide como club y que el fútbol profesional finalmente arraigue y arraigue profundamente en el Zulia.
Liga Futve debe elevar la calidad del torneo para ser más competitivo
¿Puede la Liga Futve hacer algo para intentar modificar la falta de competitividad que han mostrado los equipos venezolanos en los últimos años en el escenario internacional? En principio, Liga Futve no tiene influencia sobre los proyectos, los objetivos o la forma en que cada institución administra sus recursos o empleados. La liga es la única responsable de planificar el torneo, proponer el calendario, aprobar y hacer cumplir el reglamento que lo rige y proporcionar recursos para la retransmisión de los partidos, como ha hecho con las cadenas nacionales e internacionales.
Lo que la liga está obligada a hacer es analizar con su avanzado sistema estadístico los errores más importantes que se repiten en los torneos nacionales con el objetivo de alertar a los clubes en un intento de elevar la calidad de los partidos. ¿Cuál es la cantidad efectiva de juego? ¿Cuántos goles se marcan con un cabezazo, con un tiro libre, con una jugada conectada o con una escapada o un pase hacia atrás? Para mejorar el desempeño internacional, primero debemos tener una Liga Futve más competitiva.
Se necesita DT para cambiar la dinámica de apatía de los partidos
La realidad económica del país y las carencias históricas del fútbol nacional para consolidarse como un espectáculo con estadios llenos en cada estadio todos los días hacen imposible que los equipos de la Liga Futve estén a la par del resto de clubes de Sudamérica. , donde este deporte es una religión. Por lo que no hay forma de competir económicamente con el resto de equipos que compiten en la Copa Libertadores o Suramericana.
Por poner un ejemplo, el valor de la plantilla del Atlético Mineiro es de 88,70 millones de euros y el de River Plate es de 97,5 mientras que el valor del Deportivo Táchira ronda los 7,88 y el Caracas FC es de 6,65. La única manera de competir con mayores opciones en la élite regional es con el fútbol. Hay que centrarse en formar jugadores y entrenadores de las categorías menores. Destacar la capacidad técnica y táctica de los nuevos talentos para que lleguen con más argumentos a los profesionales. En primera y segunda división se necesitan entrenadores más orientados a objetivos, que empujen, corran, apunten y se arriesguen a cambiar la dinámica de la apatía.