La costumbre de colocar café a los difuntos sigue siendo una antigua tradición en Venezuela y otros países del continente. Muchas de las personas en la foto de la persona que estaba a su lado dejaron una taza de café, té o incluso una flor de jamaica.
Era típico ver cómo la gente ponía vasos e incluso ponía alcohol en este lugar los viernes. Esta creencia se veía comúnmente en los cementerios después del Día de Todos los Difuntos en la década de 1970.
La gente los hacía para comunicarse con el difunto. Otros simplemente porque le gustaba compartir café y conversar. Y otros para recordarlo.
Muchas personas incluso dejan comida para los difuntos tanto en casa como en el cementerio. Además, el tabaquismo, el tabaco, el pañuelo entre otras creencias que parecen un poco más arraigadas en otros años.
Café para los difuntos, ¿por qué se les pone?
Según los expertos, esta creencia se hace para mantener viva a la gente. Incluso hay quienes ponen caramelos y golosinas al difunto. Si le gustan las motos, aunque sea una moto pequeña.
Como un sombrero sobre una tumba y se hace para sentir y pensar que siguen aquí. Comenzó a aparecer en diferentes partes del continente en los siglos pasados, luego la costumbre cambió.
En México se conserva esta costumbre, y mucha gente lo hace todos los días con una taza de café. Además de otras comidas, también hay cantantes.
Fe preservada en el tiempo
Hay personas que mantienen esta creencia, mientras que otras prefieren no colocar ninguna de estas al difunto. Por supuesto, se trata de creencias muy personales de cada uno y provienen del pasado del continente, según los expertos.
Leer más en Infórmate Venezuela
Ahora continúa leyendo más noticias en nuestro portal: