Jair Bolsonaro enfrentó este martes otro interrogatorio en la sede de la Policía Federal (PF) de Brasil, por presuntamente falsificar su cartilla de vacunación para poder viajar a Estados Unidos (EEUU).
Las investigaciones de la PF son para descubrir y sancionar la supuesta inserción de datos falsos en los registros de vacunación contra la covid-19, que involucra a varios exfuncionarios del gobierno de Bolsonaro.
Un informe de la policía indica que «Jair Bolsonaro, Mauro Cesar Cid y posiblemente Marcelo Costa Câmara tenían pleno conocimiento de la inserción fraudulenta de datos de vacunación, permanecieron inertes en relación a tales hechos hasta ahora», citado por Telesur. .
Por su parte, dos exasesores de Bolsonaro, Max Guilherme y Sergio Cordeiro, fueron detenidos en un operativo policial a principios de mes por este motivo.
Bolsonaro se niega
En ese sentido, el expresidente brasileño declaró bajo juramento la tarde de este martes ante la PF que nunca habló de vacunarse ni presentó documentación que acreditara lo contrario.
Además, a principios de mayo, cuando la PF allanó su residencia para encontrar pruebas en la investigación, el político derechista dijo que sus registros de vacunación no son requeridos para ninguno de sus viajes a Estados Unidos.
“No me vacuné, punto. Nunca lo negué”, dijo.
¿Has viajado ilegalmente?
La declaración del expresidente va en contra de las políticas sobre permisos de viaje establecidas por Estados Unidos durante la pandemia, ya que este país en agosto de 2021 pidió a los visitantes sin distinción alguna que deben vacunarse con al menos dos dosis de anticovid.
Sin embargo, Bolsonaro ha entrado al territorio estadounidense al menos en tres ocasiones, dos como presidente y la última vez en noviembre del año pasado, tras su derrota electoral frente al actual presidente Luis Inácio Lula da Silva.
organismo de investigación
El líder conservador brasileño también está siendo investigado por su papel en el fallido golpe de estado pocos días después de la toma de posesión de su antecesor Lula da Silva.
En enero de este año, miles de sus partidarios de extrema derecha irrumpieron en la Corte Suprema, el Congreso y el Palacio del Planalto, animados por Bolsonaro.
Además, el Tribunal Electoral de Brasil está investigando sus acciones durante la campaña electoral presidencial, en particular sus afirmaciones sin fundamento de que el sistema de votación electrónica de la nación es susceptible de fraude.