Hace un siglo estaba de moda estar bajo el puente de Morillo, incluso caminar hasta allí y ver de cerca las cristalinas aguas del río Cabriales. Este puente fue el primero que se construyó sobre un río que cruza la ciudad.
La gente podía bajar y estar debajo del puente, especialmente cuando el río estaba bajo. De hecho, puedes ver en el gráfico cómo tiene una plataforma sobre la que la gente puede caminar.
Allí la gente podía bajar y apreciar esta obra, símbolo de Valencia. De hecho, el puente aún conserva su nombre. Aunque anteriormente se propuso cambiarlo.
Incluso se puede ver gente apreciando esta obra en la calle Colombia entre las dos avenidas del Paseo Cabriales. De hecho, esta es una de esas obras que luego se convirtieron en un tour de force con el paso de los años.
Debajo del Puente Morillo
Hace más de una década tuvo problemas y tuvo que cerrarse, pero durante décadas sirvió como puerta de entrada entre San Blas y el centro. Sigue siendo una de las obras del pasado mejor conservadas de la ciudad.
Son muchas las anécdotas e historias que definen a la ciudad asociadas al famoso puente. Incluso se dice que hace tantos años la gente lavaba ropa en las aguas cercanas a esta asombrosa obra en el río Cabriales.
A lo largo de la historia, el puente ha tenido diferentes colores, amarillo ocre, blanco, marfil, azul eléctrico, incluso recordamos que era incoloro en los años ochenta. Sólo se determinará con el tiempo.
Actualmente, está pintado de verde e incluso ha ganado fama, porque hoy en día mucha gente le toma fotografías. Lo suben a las redes sociales y su nombre se extiende por otras latitudes.
Gracias a la profesora, historiadora y columnista Rebeca Figueredo por esta foto y por dejarnos saber cuál es la historia de Valencia. Era una de mis secciones favoritas de nuestro portal.
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