Las fuerzas de defensa del Estado sionista de Israel lanzaron una nueva ola de ataques aéreos en el sur de Beirut, capital del Líbano, que dejaron al menos cuatro muertos y 24 heridos por bombas que cayeron sobre el hospital público principal de la ciudad.
Los ataques tuvieron como objetivo hospitales, incluidos los alrededores del hospital Rafiq Hariri, donde murieron cuatro personas, entre ellas un niño, informa HispanTV citando a medios locales.
La agencia oficial de noticias libanesa (Ani) informó de 13 atentados con bombas en los suburbios del sur de Beirut el lunes por la noche, después de que el ejército instara a los residentes de varios distritos a evacuar las zonas.
Los soldados invasores llevan a cabo una serie de ataques con el pretexto de que los túneles del Movimiento de Resistencia Islámica Libanesa (Hezbolá) pasan por debajo de las instalaciones de los centros sanitarios.
Sin embargo, el director del hospital al-Sahel, situado en el sur de Dahiya, rechazó las acusaciones formuladas por las autoridades israelíes y las calificó de «falsas».
Además, algunas fuentes informaron que las zonas atacadas estaban densamente pobladas por civiles, lo que dificultaba identificar el número de víctimas.
Desde octubre de 2023, los bombardeos de Israel sobre el Líbano han matado al menos a 2.464 personas mientras que otras 11.530 han resultado heridas, según cifras del Ministerio de Salud libanés.