El periodista y fundador de WikiLeaks, Julian Assange, llegó este miércoles a Australia tras ser liberado, después de que la justicia estadounidense aceptara un acuerdo de culpabilidad, poniendo así fin a más de 10 años de procesamiento en su contra.
A través de su cuenta en la red social
«Después de sufrir casi 14 años de detención arbitraria en el Reino Unido, cinco años en una prisión de máxima seguridad, por su revolucionaria labor editorial con WikiLeaks, Julian Assange ha regresado a su hogar, en suelo australiano», destacó.
Julian Assange no debería pasar un día en prisión
Su esposa, Stella Assange, y otros familiares lo esperaban en el Aeropuerto Internacional de Canberra, dijo Telesur.
Posteriormente, en declaraciones a la prensa, la esposa de Assange advirtió sobre «el peligro» del caso de Estados Unidos (EE.UU.) contra el fundador de WikiLeaks.
«Espero que los periodistas, editores y editores de todo el mundo comprendan el peligro del caso estadounidense contra Julian, que criminaliza a Julian, quien obtuvo una condena por recopilar noticias y publicar información que era verdadera, que el público merecía saber», dijo. . .
Además, comentó que este precedente puede y será utilizado en el futuro contra «el resto de la prensa» y enfatizó que Julian Assange «no debería pasar ni un día en prisión».
«Toda la prensa está interesada en buscar cambiar esta situación actual a través de la reforma de la Ley de Espionaje. A través de más protección para la prensa y, sí, eventualmente, cuando llegue el momento, hoy no, un indulto», afirmó.
Stella Assange aseguró que su marido siempre defiende los derechos humanos y a las víctimas. «Él siempre ha hecho eso. Y eso es sólo parte de quién es. Tiene principios profundos. Y siempre tiene principios profundos. Y no tiene miedo», añadió.