Desde el 18 de abril, más de dos mil estudiantes universitarios estadounidenses han sido detenidos, después de que los estudiantes de la Universidad de Columbia (Nueva York) iniciaran una manifestación contra el ataque del ejército israelí a la Franja de Gaza.
Según los participantes, la administración del centro académico ha reprimido y suspendido ilegalmente. Asimismo, los amenazaron con deportarlos por realizar la protesta. Hasta el momento se desconoce si la expulsión será efectiva o constituirá solo una advertencia, informa Telesur.
En el campus universitario, los jóvenes ocuparon Hamilton Hall y lo rebautizaron como «Hind». La idea rinde homenaje a Hind Rajab, una niña de seis años que murió en un ataque israelí al coche de su familia.
La iniciativa de Hamilton recupera el pasado histórico reciente de Estados Unidos, ya que en 1985 ocuparon el mismo espacio los activistas contra el apartheid en Sudáfrica. Lo mismo hicieron quienes rechazaron la guerra de Vietnam en 1968.
Respecto a la organización de la manifestación pro-palestina, un estudiante de segundo año de posgrado en la Escuela de Salud Pública de Columbia afirmó que «el movimiento es puramente estudiantil» y no tiene «instigadores externos».
Por su parte, imágenes en vivo compartidas por usuarios en plataformas digitales registraron a agentes del orden cuando ingresaban a la Universidad de California (Los Ángeles). Los agentes derribaron barricadas y arrestaron a manifestantes.
En este contexto, la Cámara de Representantes de Estados Unidos aprobó la ampliación de la definición del término antisemitismo, adoptada por el Departamento de Educación. De esta manera, intentan acusar a los protestantes de lanzar consignas «antiisraelíes».
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, señaló que estos incidentes no conducirán a un cambio en la política de su administración con respecto a Oriente Medio. De hecho, dijo que las manifestaciones violaban el derecho a la libre expresión y el estado de derecho.
