El Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) ha advertido que 466 millones de niños, aproximadamente uno de cada cinco en todo el mundo, viven en zonas afectadas por olas de calor extremas, más frecuentes que hace seis décadas.
El informe elaborado por las estadísticas para el periodo 2020-2024 que tienen en cuenta el calor extremo como aquellos días con más de 35 grados centígrados, alerta también del impacto negativo que puede tener en «la salud, el bienestar y las ‘actividades diarias’. la infancia
Según la directora ejecutiva de Unicef, Catherine Russell: «Los niños no son adultos pequeños. Sus cuerpos son mucho más vulnerables al calor extremo. «Los cuerpos jóvenes se calientan más rápido y se enfrían más lentamente (… ) El estrés por calor, causado por temperaturas extremas El calor presenta una amenaza muy grave para la salud y el bienestar de los niños y las mujeres embarazadas».
Países como Mali, Níger, Senegal, Sudán y Sudán del Sur -los más afectados-, donde los niños pasan más de la mitad del año en temperaturas extremas. Entre los países con oficinas de UNICEF en América Latina y el Caribe, 109 millones de niños viven en áreas donde las olas de calor se han duplicado y 56 millones en lugares donde se han triplicado.
Mientras que en Europa y Asia Central, 55 millones de menores viven en zonas donde la frecuencia de este fenómeno extremo también se ha duplicado y 7 millones en otras donde se ha triplicado.
Fuente: Telesur
VTV/JR/CP